Ingeniero sanfrancisqueño trabajó en el satélite que hoy será lanzado al espacio
Miles de personas seguirán el lanzamiento en Estados Unidos de la nueva "máquina" ítalo - argentina. Es el quinto de industria nacional con este destino. Muchos kilómetros más adentro de este planeta, Nicolás Alberto verá como el proyecto del que participó cobra vida junto con sus sueños.
A las 23.21 hora argentina, este domingo el Satélite Argentino de Observación con Microondas (Saocom) 1Aestará en el espacio. Será el quinto que atraviese las capas de la Tierra y envíe información desde el exterior.
Finalmente y tras un largo tiempo de trabajo, diseño y testeos este proyecto de industria nacional está listo para ser puesto en órbita. Lejos de ahí y en las Sierras lo va a mirar Nicolás Alberto, un ingeniero Electrónico y magíster en Instrumentos Satelitales, nacido en San Francisco y parte del equipo que trabajó para construir este satélite.
El ingeniero trabaja en la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) en el Centro Espacial "Teófilo Tabanera" ubicado en Falda del Cañete. Su llegada ahí requirió estudio, esfuerzo y fue con el tiempo que descubrió que ahí en la industria espacial estaba su "verdadera pasión".
De perfil bajo, el joven de 31 años habló sobre su vocación, desempeño y encuentro con esta área poco conocida por el común de la gente y que habla del potencial industrial que la Argentina desarrolla pese a la crisis.
A 250 kilómetros, un hallazgo
"Mi lugar de trabajo está en el medio de la montaña", contó Nicolás mientras buscaba un mejor lugar para charlar con LA VOZ DE SAN JUSTO. Vive en la ciudad de Córdoba, pero trabaja a 35 kilómetros de allí y a 250 de San Francisco en el Centro Espacial de Conae en Falda del Cañete.
Mientras buscaba una mejor posición, en el medio relató que sus estudios - siempre con un promedio superior a 8 - se orientaron a lo técnico. Sobre aquella época detalló que sus primeros pasos los dio en el IpetN° 50. "Ing. Emilio F. Olmos" y continuó por los pasillos de la Facultad Regional San Francisco de la UTN para después recibirse, previo paso por Córdoba, de ingeniero Electrónico.
"Ahí empecé a trabajar haciendo electrónica para agroindustria y con un proveedor de Conae. Después hice un posgrado en Conae donde hay una pequeña universidad. Fue una maestría y egresé como magister en Instrumentos Satelitales. Era de dedicación exclusiva y con una beca, esa es la única forma de hacerlo", agregó Alberto.
Su llegada ahí no fue casual porque cuando era un estudiante no conocía el trabajo que la Argentina desarrollaba en materia satelital: "Empecé la carrera teniendo dudas sobre el futuro y después mientras estaba transitando la ingeniería tuve la oportunidad de ir a un congreso a Bariloche y hubo una visita guiada a Invap. Hasta ese momento no sabía que había satélites en el país, después me enteré que existía toda esta industria".
Su aporte
Alberto después de ese posgrado ingresó como parte del personal a Conae. Ahí pasa gran parte de sus días trabajando en algo que lo apasiona. Eso fue hace un año y medio aproximadamente y desde entonces, al igual que su equipo de trabajo, está abocado al proyecto de Saocom.
"Yo soy ingeniero de ensayos de antena, dentro de este proyecto el Saocom tiene un radar que está compuesto por una gran antena. Está formada a su vez por 140 antenas y mi grupo de trabajo ensaya cada parte en forma individual y después completa. Todo eso dentro de una cámara especialmente diseñada", relató sobre su trabajo en la sede de Falda del Cañete.
Su trabajo se divide en dos partes. Primero se hace todo el diseño y técnica para después ensayarlo en el laboratorio. En la actualidad, mientras el Saocom 1A se pone en órbita, en la tierra siguen trabajando en su gemelo.
"Estamos haciendo un satélite gemelo que se pondrá en órbita el año próximo así que seguimos con los trabajos y ensayos. Por el momento, mi grupo de trabajo está trabajando en estos proyectos a los que se les dio prioridad", indicó Nicolás.
El ingeniero sanfrancisqueño encontró su camino casi de casualidad en esa visita en Bariloche. Ahí empezó una etapa diferente de su vida ligada al desarrollo de la industria satelital en el país.
Saocom 1.A será el primer satélite en el que Nicolás haya contribuido con su trabajo y alto conocimiento a la industria nacional tantas veces puesta en tela de juicio a consecuencia de administraciones estatales deficientes, de la corrupción y las crisis cíclicas.
La del satélite es una industria que creció exponencialmente en los últimos años. Arsat quizá sea el nombre más renuente en la memoria de los ciudadanos. Esta será la quinta vez que uno de estos aparatos sea lanzado al espacio, pero éste para todos será más especial porque una parte de él lleva toda la ingeniería local, la de Nicolás. ¿O alguna vez pensaron que un sanfrancisqueño sería parte del lanzamiento de un satélite nacional?
El equipo detrás del satélite
desarrollado en la Argentina por la Conae y el Invap.
¿Qué es Saocom?
La Conae confirmó que el despegue será desde las 23.21, hora argentina, desde la Base Vandenberg, en Estados Unidos. La cobertura podrá seguirse en vivo en la TV Pública.
Este será el quinto satélite nacional en ponerse en órbita, aunque su misión es diferente en este caso.
Saocom 1.A busca atender las necesidades de información de los sectores socio productivos considerados en el Plan Espacial Nacional, e integrar en forma operacional el Sistema Ítalo Argentino de Satélites para la Gestión de Emergencias (Siasge), resultado de la cooperación vigente entre las agencias espaciales de Argentina Conae y la Agencia Espacial Italiana (ASI) de Italia. Saocom 1.A generará información destinada a la gestión de Emergencias para identificar zonas en riesgo de inundación y dar alertas tempranas, detectar suelos muy secos con riesgo de incendios. También permitirá generar mapas de humedad del suelo diariamente, de riesgo de enfermedades de cultivos y evaluar escenarios para la toma de decisiones de siembra y fertilización, así como conocer la cantidad de agua disponible en nieve húmeda para riego, obtener mapas de desplazamiento de glaciares, terreno y alturas, entre otras aplicaciones.
En 2019 está prevista la culminación y puesta en órbita del Saocom 2 que incorporará avances tecnológicos a partir de la experiencia de su gemelo.