Frontera: piden donaciones para no cerrar un merendero
Le da de comer a 150 niños de lunes a sábado, el doble que tres meses atrás. Sus responsables aseguran que si en esa ciudad funcionaran guarderías municipales, los chicos no pasarían hambre.
El merendero "Sueños compartidos", ubicado en calle 56 al 155, que asiste a uno 150 niños de lunes a sábados, podría cerrar sus puertas. Esto sucederá si en los próximos días no se consiguen nuevas donaciones de alimentos para preparar la merienda.
Si bien, su administrador, Mariano Cortez dijo que "hace tiempo tienen faltante", ahora se llegó a una situación extrema porque la leche, cacao, azúcar y té escasean, y no alcanzan para todos los chicos que llegan a golpear su puerta.
Dos factores son los que a juicio de Cortez influyeron en la escasez: la crisis influyó para que los niños que asisten al merendero sean el doble de hace tres meses y por otro lado, la ausencia en Frontera de guarderías y espacios públicos de contención y ayuda para las familias carenciadas.
"Es muy doloroso lo que estamos pasando. Sería muy triste tener que cerrarlo porque acá no hay guarderías municipales como sí existen, por ejemplo, en San Francisco. Si hubiera, ellos tendrían una merienda o desayuno y más apoyo", expresó Cortez a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Y agregó: "Acá hay chicos que ni siquiera van a la escuela y aunque pedimos que vengan de la municipalidad, nadie se acercó".
No tienen mucho tiempo porque las reservas en el merendero están bajas, pero los chicos, sus tazas y necesidades no lo entienden y por eso la solidaridad es la alternativa que para Cortez en este momento tiene más valor y a la cual apela.
Mariano y su mamá llevan adelante el merendero "Sueños compartidos" que hoy, sin leche ni azúcar, podría cerrar sus puertas.
Situación desesperante
La institución funciona desde hace un año, es llevada adelante por Mariano y su mamá, que aunque están atravesando problemas de salud no claudican en su afán de pensar en el otro. Según explicó Cortez, inicialmente atendían a unos 90 niños, pero en los últimos meses la cantidad aumentó al doble llegando casi a los 150.
"Nosotros hace rato que venimos con faltante pero ahora si no conseguimos leche vamos a tener que cerrar. Nunca recibimos ningún aporte político, o de un supermercado. Todo lo que conseguimos fue gracias al obrero común", indicó Mariano.
No solo son chicos los que llegan al merendero de calle 56 de Frontera, también hay familias que cuando falta comida para poner en el plato se acercan a pedir una mano.
"No hay mucho más interés que el nuestro - en referencia a quienes llevan adelante merenderos - cada vez vienen más familias a pedirnos comida. Nosotros los ayudamos hasta donde podemos porque también somos pobres y de nuestro bolsillo pagamos todo", sintetizó.
La misma gente de alrededores y colaboradores desinteresados les daban los alimentos que hoy "les van a pedir" y ante tantas bocas a las que ayudar todo lo acumulado se esfuma rápido.
En este sentido, el entrevistado recalcó: "En el merendero les damos la merienda de lunes a sábado de 15 a 19, los chicos vienen de San Francisco, barrio Acapulco y distintas partes de Frontera".
Lo que hace falta
Lo que más les urge conseguir en "Sueños compartidos" es leche, cacao, azúcar y té para preparar las meriendas. Cortez graficó que por cada día se usan unos "20 litros de leche y 10 de té" para alimentar a los chicos.
Las donaciones las pueden alcanzar al merendero ubicado en calle 56 al 155 de la vecina ciudad, o bien comunicarse al teléfono (03564) 15586496.