Falta de licencia sanitaria, la principal infracción de comercios de alimentos
A la lista de contravenciones le siguen problemas de higiene y después, la carencia del registro de productos que elaboran o comercializan.
Una de las infracciones más comunes cometidas por los establecimientos que manipulan o elaboran alimentos en nuestra ciudad es la falta de carné sanitario seguido luego por problemas de higiene y por último, la carencia del registro de productos que elaboran o comercializan.
Desde la municipalidad de San Francisco, a diario se llevan a cabo inspecciones en los establecimientos que trabajan con productos alimenticios con el objetivo de supervisar que se lleven a cabo de manera correcta las prácticas que se deben observar en el proceso de elaboración y manipulación de manera de evitar cualquier inconveniente que pueda afectar la salud de la población.
La jefa de Control Alimentario, Silvia Ruffino, comentó ayer a LA VOZ DE SAN JUSTO que "la irregularidad más común es la falta de carné sanitario. La gente no cumplimenta con esta obligación y por ende no hace el curso para capacitarse y luego obtener esta licencia. Si bien es una obligación, muchos postergan este trámite pese a que es importante tener esta documentación para tener la posibilidad de manipular de manera correcta los alimentos".
La licencia dura cinco años
En este caso, "es necesario comprobar que la persona que realiza esta tarea no tenga ninguna enfermedad infecto contagiosa para lo cual se hacen todos los estudios que se renuevan anualmente y cada cinco años se cambia el carné", agregó Ruffino.
Paralelamente a ello, explicó que "también se hace un curso de capacitación para ellos porque vemos que a muchos les falta conocer que los controles no son algo punitivo sino que vienen luego de la preparación y la formación en este tipo de actividades".
Otra de las observaciones que surgen de las distintas inspecciones realizadas en la ciudad, según indicó Ruffino, tiene que ver con la higiene. "La gente no tiene muy en cuenta el cuidado de la higiene en los establecimientos y los equipos tanto de refrigeración como donde se elaboran los alimentos y si esto pasa se favorece a la contaminación ya sea por suciedad en las heladeras o en las distintas instalaciones".
Alimentos vencidos, no
Luego dejó a salvo la existencia de alimentos vencidos al señalar que "la gente se cuida mucho de que esto no suceda porque esto puede tener muchas consecuencias".
Entre otras observaciones están las que tienen que ver con "fallas en infraestructura, revoques caídos o no cuentan con las luminarias que se requieren. Muchos pelean contra las plagas pero por otro lado carecen de las telas mosquiteras que corresponden de manera que no trabajan mucho en materia de prevención".
Además, la entrevistada comentó que ante la constatación de alguna infracción, "confeccionamos el acta que va al Tribunal Administrativo de Faltas y un libro de infracción donde se consigna la falta, se le otorga un plazo al infractor luego del cual vemos si mejora. De todas maneras, si una vez que terminó el plazo no se cambió la actitud, el acta de constatación va al Tribunal de Faltas y allí decide la jueza".
Aclaró luego que la tarea de supervisión en la calle "es permanente" y en ese marco de realizar el trabajo diario de inspección "bastante seguido" se detectan irregularidades que pueden terminar "en clausuras de establecimientos" de acuerdo a lo que se determine desde el Tribunal de Faltas.
Capacitaciones
"La obligatoriedad pasa por cuidar a la comunidad -afirmó Ruffino-. Si no hacen los cursos luego no pueden sacar el carné sanitario. En esto actuamos de conformidad con lo que establece el Código Alimentario Argentino en su artículo 21º que establece que para sacar la libreta o carné sanitario el solicitante debe tener el curso de manipulador hecho. De esa manera el médico no va a otorgar nada si no le llevan el certificado del curso que tiene una duración de cinco años", aclaró.