Especialistas consideran necesario un nuevo sistema penal juvenil, pero creen que bajar la edad de imputabilidad no sirve
La presentación una vez más del proyecto en el Congreso volvió a instalar la discusión sobre el carácter punitivo de la justicia en plena antesala de campaña electoral. Políticos, abogados, familiares de víctimas e investigadores dieron su postura sobre un controvertido tema que reavivaron casos recientes como el de Leandro Ariel Porcet, el joven asesinado tras resistirse al robo de su celular Isidro Casanova y un fallos judicial sobre el caso Rolando Margaría.
En medio de un año electoral con el foco puesto en la seguridad, uno de los anhelos del gobierno nacional es la aprobación por parte del Congreso del proyecto de reforma del "Régimen Penal de Minoridad" y la creación del "Sistema de Responsabilidad Penal Juvenil".
La norma pretende establecer la responsabilidad penal de los adolescentes un año antes de lo que se hace actualmente, es decir, a los 15, con el objetivo de"fomentar en el adolescente el sentido de la responsabilidad por sus actos y procurar su integración social".
La actual estructura que data de 1980, persigue un fin que esencialmente no es punitivo, siendo "la pena el último recurso", tal como lo sostuvo días atrás el juez de 1º Nominación Comercial y de Familia de San Francisco, Carlos Ignacio Viramonte, quien llevó adelante el juicio por el homicidio en ocasión de robo de Rolando Margaría.
Esta reforma del sistema penal juvenil despertó un debate en todo el país, y del cual nuestra ciudad no está ajena.
Algunos creen que bajando la edad se podría mejorar; otros, que el Estado necesita arbitrar mejores herramientas antes que nada para encarar la reforma.
Las aristas son muchas y las voces también. Familiares de víctimas de la delincuencia juvenil, abogados, dirigentes políticos, alzaron la voz en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO para hablar de un tema que despierta controversias y es de los que más preocupan en la actualidad.
Derechos básicos
Aunque la reforma apunta al derecho penal juvenil, las cuestiones sociales también se ven involucradas en el tema, e inciden. Andrés Romero, referente del espacio polínico Unidad Ciudadana en nuestra ciudad, se expresó sobre el tema y dijo que la incidencia de los menores en el total de delitos graves que se comenten en el país es muy pequeña.
Por eso resaltó: "La mayoría de los delitos son en contra de la propiedad y no contra la vida de las personas. Por lo tanto, no estamos hablando de que el problema central de la inseguridad son los adolescentes".
Romero consideró que es necesario que el Estado "genere igualdad de oportunidades y garantice los derechos básicos para que la delincuencia no siga perpetuándose como forma de vida", pero insistió en que "esto requiere de voluntad política".
Andrés Romero, político: "El Estado debe generar igualdad de oportunidades y garantizar los derechos básicos para que la delincuencia no siga perpetuándose como forma de vida. Bajar la edad de punibilidad para lograr mayores niveles de seguridad es una falacia; implicaría un retroceso en materia de derechos".
Situaciones como la "pérdida de empleo, exclusión, falta de contención de la sociedad y de la familia" inciden en los jóvenes que delinquen. "Si no existe un Estado presente desde la primera infancia, donde se fortalezca la protección integral, caen en la desesperanza", aseveró el político.
Romero dejó en claro que al momento de establecer un Régimen Penal Juvenil deben atenderse a dos cuestiones. Primero que sea acorde a los principios y estándares internacionales en materia de niñez y adolescencia y derechos humanos, y por otro lado, ser respetuoso de los derechos y garantías de los y las adolescentes que debe regir para la franja de 16 y 17 años.
Además, aseguró que "bajar la edad de punibilidad para lograr mayores niveles de seguridad es una falacia"; y subrayó que "implicaría un retroceso en materia de derechos de la juventud y no se respetaría el principio de progresividad de derechos que exige la Convención del Niño a la cual adherimos como país y tiene rango constitucional".
Sería un error
Para los abogados especializados en derecho penal y penal juvenil, el proyecto de reforma no está adecuado de acuerdo al contexto y hay otros factores que inciden, por lo que lo consideran "populismo legislativo", aludiendo a que este es un año electoral. En este sentido, el abogado Felipe Truco consultado por este diario sostuvo que "en el país no hay monitoreo ni estadísticas serias que permitan hacer prevención de la delincuencia juvenil".
Y en base a su experiencia, señaló: "Entre los 15 y 16 años hay muy pocos casos de delitos graves, de modo que llevar eso al centro de discusión política, sin plantear todas las deudas que el Estado tiene en materia de seguridad y justicia, es simplista, es pura publicidad y populismo legislativo. Hay más víctimas que victimarios".
Felipe Truco, abogado penalista: "En el país no hay monitoreo ni estadísticas serias que permitan hacer prevención de la delincuencia juvenil. Entre los 15 y 16 años hay muy pocos casos de delitos graves, de modo que llevar eso al centro de discusión política es simplista, es pura publicidad y populismo legislativo".
La inseguridad y la situación de los menores son dos temas que inciden en el debate social hoy en día. Sobre este punto, Truco dijo: "Se instaló la peligrosidad de los menores como hecho; la opinión pública reclama una solución al problema y la baja de la edad de imputabilidad no lo hace pero les da la sensación que tiende a resolverlo".
Una línea de pensamiento similar tiene su colega Rubén Caffaratta, quien fue querellante en el juicio a los menores que fueron encontrados responsables por el homicidio de Margaría.
"Bajarla es un error. Si lo hacemos y seguimos con los mismos parámetros que ahora sin darles educación, cultura, es lo mismo. Es imposible pensar que por una ley vaya a cambiar la situación en que nos encontramos", enfatizó Caffaratta.
El proyecto actual sostiene que deberán existir centros especializados para la contención y reeducación de los menores que comenten un delito grave. Una situación similar a la actual.
Rubén Caffaratta, abogado penalista:"Bajarla es un error. Si lo hacemos y seguimos con los mismos parámetros que ahora sin darles educación, cultura, es lo mismo".
Esta es una realidad que el abogado conoce de cerca por su experiencia y sobre ello dijo: "A los chicos los almacenan en un centro donde los celadores y psicológos hacen maravillas para reinsertarlos en la sociedad. Ahí, lejos de reeducarlos para que vuelvan a la sociedad de manera distinta no tienen medios para hacerlo, sino que lo hacen peor que cuando estaban, y solo un mínimo porcentaje logra recuperarse".
Se puede salir
El investigador local y médico Carlos Cornaglia consideró que "la baja en la edad de imputabilidad no es suficiente". Pero sí cree posible que una persona que delinque pueda recuperarse "en tanto se coordinen políticas destinadas al ataque de los factores que lo causan".
Cornaglia se explayó y agregó que no se trata de morigerar la pobreza, aumentar la ayuda económica a los más necesitados. Lo que es necesario abordar es el abandono, la marginalidad y la exclusión social que sufren estos menores.
"Además, es fundamental la lucha implacable contra el narcotráfico y el consumo de drogas. Los pibes adictos delinquen con la finalidad de obtener recursos para comprar drogas", profundizó.
El contexto social actual donde la delincuencia juvenil está en foco de discusión fue descripto por Cornaglia como "de permanente crispación", donde se multiplican los casos de "maltrato, abandono y adicciones".
Carlos Cornaglia, médico e investigador: "Es fundamental la lucha
implacable contra el narcotráfico y el consumo de drogas. Los pibes adictos
delinquen para obtener recursos para comprar drogas".
Pero hizo hincapié en la crisis de la familia como entidad rectora y de control. "Los padres deben enseñar a sus hijos el respeto de la ley y las normas elementales de convivencia y fundamentalmente, predicar con el ejemplo. Hay que considerar además el factor educativo. En la mayoría de los menores con conductas antisociales es posible detectar un fracaso del sistema educacional", puntualizó.
Bajar la edad de imputabilidad para Cornaglia es un error, pero sí "considera acertado que el debate exista, "en tanto se enfatice la necesidad de reinserción social y contemple el estado de vulnerabilidad de los menores".
No se reeducan, dice la hermana de una víctima
Uno de los casos de violencia juvenil emblemáticos en nuestra ciudad, fue el fatal asalto a Rolando Margaría (60). El hombre era empleado de Epec, en 2015 fue asaltado afuera de su casa por tres menores; lo apuñalaron en el abdomen lo que le causó la muerte días después.
En el juicio, un menor fue absuelto y a los otros dos se les impuso una medida tutelar. La medida no dejó satisfechos a sus familiares. Su hermana Rita fijó su postura respecto de los menores involucrados en delitos.
"Los ampara de tal forma los derechos humanos que pueden matar y no pasa nada. Sé que la educación - a la que considera fundamental - empieza en casa, pero si hubiera mejor educación en las escuelas y pagara más a los docentes creo que mejoraría un poco. No así con la pobreza porque pobres hubo siempre, pero no delinquían", expresó la mujer.
Rita, hermana de Rolando Margaría: "No creo que los delincuentes se recuperen. Desde los 15 años debería enjuiciárselos como a cualquier otro delincuente, sin que haya diferencias entre adultos y menores y con penas duras".
Desde su perspectiva, el sistema y la ley quedaron desactualizada. "La ley que rige ahora es muy vieja y los chicos no son más como los muchachos de antes. Hoy cuando la Policía los detiene solo toma la declaración y después los tienen que dejar ir", comentó con un dejo de indignación la mujer.
Rita tampoco cree que quienes comienzan a delinquir se puedan reeducar: "No creo que los delincuentes se recuperen, ni aun con ayuda o terapia. Son bien vivos ellos todos los informes los pasan bien. En nuestro caso, los menores estaban excelentes pero mientras tanto uno de ellos estaba robando de nuevo. Les mienten hasta a los propios psicólogos".
Rita cree que "desde los 15 años debería enjuiciárselos como a cualquier otro delincuente, sin que haya diferencias entre adultos y menores y con penas duras".
Qué dice el proyecto
El proyecto del nuevo Régimen de Responsabilidad Penal Juvenil prevé bajar la edad de imputabilidad de 16 a 15 años en los casos de delitos penados con más de 15 años de prisión.
Uno de los puntos centrales es la edad de imputabilidad, que se establece de acuerdo al monto de las penas fijadas por las leyes a partir de los 15 años, en el caso de que el menor cometiera algún delito reprimido con pena máxima de 15 años de prisión o más en el Código Penal.
La iniciativa que consta de más de 100 artículos, tiene como ejes "contar con una Justicia especializada, abordar los problemas desde una perspectiva multidisciplinaria y restaurativa; fomentar en el niño o el adolescente el sentido de la responsabilidad por sus actos; y procurar la integración social de los jóvenes e involucrar activamente a las víctimas", según la información oficial.
Será imputable el adolescente mayor de 16 años y menor de 18 que cometiera un delito de acción pública previsto en el Código Penal y leyes especiales, con excepción de aquellos penados con un máximo de tres años o sancionados con multa o inhabilitación como pena principal.
El proyecto fija con carácter excepcional la sanción privativa de la libertad "que sólo podrá imponerse cuando las medidas o sanciones socio-educativas y disciplinarias no resultaren adecuadas para los fines de esta ley o fracasen con anterioridad por razones imputables al adolescente".