Escuela técnica de Vignaud favorece la continuidad generacional en el campo
El IAS es el único colegio secundario del pueblo y una de las dos agrotécnicas salesianas que quedan en la provincia. Funciona además como casa y parroquia de los chicos. Fiel al estilo de Don Bosco, la cultura y el amor al trabajo es la principal enseñanza. Sus egresados aportan al desarrollo agroindustrial regional.
Vanina Panero | LVSJ
Desde hace más de un siglo, las escuelas agrotécnicas salesianas (EAS) son un pilar distintivo y característico de la propuesta educativa de Don Bosco en la Argentina.
Esta propuesta pedagógica posibilita a los jóvenes estudiar en sus lugares de origen, brindan oportunidades a quienes viven en zonas rurales y les permiten aprender desde las prácticas productivas para que tengan un medio de sustento en el futuro. Todo esto, dentro de un ámbito familiar y de calidad académica propio de la propuesta educativa salesiana que es casa, patio, escuela y parroquia.
El Instituto Agropecuario Salesiano (IAS) "Nuestra Señora del Rosario", en Colonia Vignaud es uno de los diez que se distribuyen en todo el país, y forma parte de los únicos dos que funcionan en la provincia de Córdoba.
El valor de esta propuesta tiene como pilar fundamental: inculcar la cultura y el amor al trabajo, garantizando en muchos casos, la continuidad generacional en los establecimientos agropecuarios de nuestra región.
Es además la única escuela secundaria del pueblo, que por su perfil agroproductivo, sostiene la matrícula año a año. Inclusive, cuenta con la mitad de su alumnado pupilo.
Formarlos en la cultura del trabajo, el objetivo
"Queremos brindarle siempre lo mejor a los jóvenes, sobre todo inculcarles el amor al trabajo. No que esperen que el Estado o las familias arreglen todo. Cada uno tiene que abrirse camino y ser responsable de su profesión y de su vida", expresó el padre Edgardo Zenclusen, párroco de Vignaud.
Zenclusen- quien además fue alumno y se desempeñó dos veces como director del IAS- recordó que la escuela nació en 1903 como colegio sólo para varones. Fueron pasando distintos planes de estudios, en aquel entonces orientado a magisterio.
En 1975 se transformó en Instituto Agrotécnico Salesiano y pasó a ser mixta, siendo la primera promoción de técnicos agrónomos en 1980.
Desde entonces, el IAS es uno de los preferidos por las familias agropecuarias de nuestra región, que cuenta con demanda sostenible cada año.
"Contamos con 50 ingresantes cada año y muchos pedidos", precisó Zenclusen.
Consultado sobre la causa por la cual las familias siguen eligiendo esta escuela para sus hijos, aseguró que "la gente reconoce que se necesita una cultura del trabajo. En zona netamente agrícola ganadera desde sus inicios, muchas familias del medio rural piensan que lo mejor para sus hijos es una salida laboral en el campo; ya sea en producción, mecánica agrícola, y muchas otras opciones que brinda esta especialidad".
"Inclusive muchos de nuestros estudiantes son hijos de ex alumnos, que también apuestan a brindar continuidad generacional a la actividad", reflexionó.
La mitad del alumnado vive en el colegio
Antes de la pandemia, 120 de los 250 alumnos que tiene la escuela estaban pupilos. Hoy, ese numero se reduce a la mitad, siendo que los cursos funcionan en dos burbujas que combinan clases presenciales con virtuales.
"De lunes a viernes los chicos viven en la escuela y se van a su casa los fines de semana. Aunque antes de la pandemia sólo viajaban una vez al mes", contó el párroco.
En esto reconoció que "se necesita una gran vocación de los docentes y tutores que los acompañan durante todo el día para que lo que los chicos se sienten cómodos y en familia, ya que su vida transcurre en la escuela y se genera una convivencia muy linda, que los chicos disfrutan".
"Es como una gran familia que debe formar, cuidar y aconsejar a los chicos como a sus hijos y acompañarlos con mucho cariño", agregó Zenclusen.
El párroco rescató como clave la enseñanza de Don Bosco: "ayudarlos, acompañarlos, estar presentes como familia, animarlos en los momentos difíciles y sostenerlos en las dificultades".
Por su parte, el
director del IAS, Gustavo Mina aseguró que "es una escuela distinta, que le
abre la mente a los alumnos acerca de las múltiples posibilidades que tienen de
salir al mundo laboral". En este sentido
notó que en los últimos años se diversificó el tipo de carreras profesionales
que eligen los chicos cuando egresan, siendo que no todos se limitan a estudios
afines. "Aunque un gran porcentaje de
chicos se van directamente a trabajar al campo de su familia". Para ello, la
escuela también les brinda talleres como el de orientación vocacional. De hecho este
formó parte de una de las tantas actividades que se realizaron en el marco del
Día de la Enseñanza Agropecuaria, que incluyeron también misa criolla, taller
de jura animales, una charla sobre comunicaciones del medio rural y hasta un
concurso de empanadas. Muchas de ellas se repiten esta semana, con la burbuja
2.Una propuesta
diferente