Es jubilado, escribió sus propios carteles buscando casa y su historia tuvo final feliz
Juan Horeste Sosa tiene 68 años y cobra la jubilación mínima ya no podía pagar el alquiler y escribió carteles ofreciéndose para trabajar cuidando casas con sus propias manos y ahora consiguió un lugar.
Juan Horeste Sosa tiene 68 años, vive en Villa Nueva y cobra la jubilación mínima, unos 16 mil pesos. Agobiado por la desesperante situación económica, hace unos meses decidió escribir de puño y letra varios carteles donde se ofrecía a cuidar casas en algún pueblo o campo de la zona donde reside.
"Me ofrezco. Soy jubilado viudo, no puedo pagarme más el alquiler, para alguien que necesite cuidarle la casa en el pueblo o campo, no le cobro sueldo", decían los carteles, que Juan pegó en locales y comercios de Villa Nueva. El pedido pronto se volvió viral en redes sociales.
En una entrevista realizada con El Diario semanas atrás, el hombre contó los motivos que lo llevaron a buscar trabajo.
"Lo puse en distintos negocios para ver si salía algo. El problema mío es que soy jubilado y la mínima no es casi nada. Encima, había sacado un crédito de Anses y por eso cobro cada vez menos", relató.
No podía pagar más
De acuerdo con Juan Horeste, "es imposible pagar el alquiler" en la situación que se encuentra: incluso no reside en una vivienda, sino en un pequeño local comercial. "Es lo que conseguí", afirma. "Soy de la zona de Pampayasta, no del pueblo sino del campo. Me crié en esa parte de los 7 a los 21 años. Después me casé y anduve por distintos lados, pero siempre trabajando en campos".
Hace 3 años, Juan pudo jubilarse y se mudó a la localidad de Villa Nueva: "la fui remando porque podía hacer algunos trabajos, pero tengo artrosis. Hay ciertas cosas que no puedo hacer más, por eso vendí la máquina con la que cortaba el pasto. Ahora tengo que vivir sólo de la jubilación", lamentó.
"Está complicada la situación económica. Estoy cobrando 16 mil y algo, es dura la mano. Gracias a Dios que no tengo enfermedades malas, solo el dolor en la columna y artrosis en los hombros, pronto tengo que ir a un traumatólogo... Es que los años no vienen solos".
Juan insistía con trabajar en un campo porque tiene experiencia en el rubro. "He trabajado hasta en vivero así que, si hay que hacer alguna plantación, cuidados, puedo hacerlo, aunque no mucho porque me jode a la columna las cosas pesadas, pero algo livianito sí. Me gusta cuidar casas de campo porque además tengo espacio para tener una quintita. No cobraría nada, solo que me den una casita, un espacio, no importa cómo sea, yo llevo mis muebles".
Final feliz
El pedido de Juan conmovió a miles de usuarios de las redes sociales y sus carteles escritos a manos circularon por todo el país. El jubilado volvió a hablar con El Diario y contó que recibió "muchísimos, pero muchísimos llamados. Te digo más. La mayoría fue del Chaco, Santiago del Estero, Buenos Aires, Córdoba".
"Ya tuve conversaciones con un señor que tiene un campito en Villa Nueva, saliendo para Arroyo Cabral, lo fui a ver y todo, y está poniendo en condiciones la casita para darme el trabajo", expresó.
"Estoy cerca de conseguir. Anoche justo me llamaron para ofrecerme otra posibilidad. Diosito siempre está. Dicen que te puede tratar de apretar un poco, pero no ahorca. Hay que tener fe. Con la edad que tengo me ha pasado mucho en la vida, pero siempre las enfrenté. Estoy contento, gracias a Dios", cerró Juan, visiblemente emocionado.