En Toro Pujio, el caballo criollo pisa fuerte
Una familia de Toro Pujio se dedica a la cría de caballos de esta raza para competir en una disciplina tradicional. De esta manera, busca continuar con el legado de la raza en el país, siendo unas de las pocas en San Justo
Emplazada en la zona rural de Toro Pujio se encuentra la cabaña Aljosoay, una de las pocas de la provincia dedicada a la cría de caballos criollos de pedigrí. Se trata de una pasión familiar que supo transmitir Edgar Cornaglia, un productor ganadero que paralelamente, y como hobbie cría equinos para competir en una disciplina popularmente conocida como paleteada.
Edgar, junto a su esposa Silvia, sus hijos Aylén, Sofía y Alexis y su sobrino Joaquín, comparten la pasión por los animales que son criados especialmente para este tipo de competencias.
Se trata de una de las pocas cabañas del interior que realiza esta actividad con el objetivo de "preservar la sangre criolla"
"Toda mi vida viví en el campo y estuve en contacto con los caballos. Siempre me dediqué a la cría y doma de caballos , pero desde hace diez años, exclusivamente a la cría de caballos criollos de pedigrí y desde hace seis, para esta disciplina", comentó Cornaglia a LA VOZ DE SAN JUSTO.
"Tengo 50 años y desde los 6 estuve con los caballos, inclusive sigo viviendo en la casa materna, en la zona rural de Toro Pujio, herencia de mis abuelos", agregó.
Allí vive junto a su familia, siendo su base de sustento la actividad ganadera vacuna, pero su hobbie, los caballos.
"Uno se priva de muchas cosas y pone plata en esta actividad que demanda mucha inversión en genética, y es muy poco lo que retorna", sostuvo. Al mismo tiempo recordó que "no es una disciplina en la que se compita por plata".
"Siempre hemos vivido en el campo y hemos tenido la tarea de la ganadería nos resultaba muy común trabajar con vacunos, por lo que me gustó más esta parte de los equinos. De hecho es algo que hacemos por hobbie porque vivimos de la actividad ganadera", manifestó Cornaglia.
La paleteada argentina, una disciplina que es bien representada por Aljosoay
Difundir la raza criolla
"Mi idea es difundir la raza criolla en distintos lugares del departamento San Justo, ya que este tipo de competencias se realiza en muy pocos lugares del interior provincial, y en San Justo, sólo en mi establecimiento y en Balnearia".
Con respecto a los orígenes de la raza, Cornaglia manifestó que "el caballo criollo surge desde Chile. Ahí hubo gente que cruzó la cordillera y empezó a difundirlo en nuestro país descubriendo que se trata de un caballo noble, fácil de mantener".
En este sentido, el titular de Aljosoay aclaró que "no es lo mismo que mantener un caballo de pura sangre de carrera, que uno de estos, el caballo criollo sigue siendo más rústico".
"Es la raza más antigua ya que los primeros caballos criollos que pisaron nuestras tierras fueron los españoles y no permutaron", reconoció.
En este sentido recordó además que el caballo criollo ha sido declarado recientemente caballo nacional y patrimonio cultura, por el Senado de la Nación.
"Mi mayor orgullo es poder disfrutar de este hobbie en familia y que mis hijos sigan con esta pasión y que la transmitan a sus generaciones . De hecho me gustaría que mis nietos sigan con esto".
Alejo y Marcelo, los jinetes campeones mundiales del rodeo en Brasil
Campeones mundiales
Acerca de la paleteada argentina, el propietario de la cabaña Aljosoay (que responde a las primeras sílabas del nombre de sus hijos y sobrino), explicó que "nació en la zona de Rosario y La Pampa y contempla la participación de dos caballos con sus jientes y un vacuno. Los caballos deben llevar al vacuno, apretado durante 60 metros sin que se escape. Al culminar este trayecto, el jurado da el puntaje que está dividido en cuatro campos".
Entre los mayores logros de esta competencia, Edgar destacó el título de Campeón Mundial de Rodeo (Paleteada) de la Federación Internacional de Cabañas de Criadores de Caballos Criollos que ganaron sus jinetes Alexis Cornaglia y Marcelo Dominguez con la monta de Cañumil Dominga y Nutriero Vinchuquita, respectivamente. Siendo la única cabaña de la provincia de Córdoba que participó de esta competencia disputada recientemente en el mes de mayo en Porto Alegre, Brasil.
Una de las pocas en la región
Por otro lado, Cornaglia reconoció que "en la provincia de Córdoba hay muchas cabañas que se dedican a la cría de caballos criollos, pero muy pocas que se dediquen de manera exclusiva a la competencia y menos aún a esta disciplina".
"Las razones pasan por un tema de mano de obra, ya que
hay que criar caballos de pedigrí y de sangre funcional porque no es que cualquier caballo criollo tenga la sangre para hacer esta disciplina", precisó.
"En nuestro caso, todos se crían con este fin. De hecho invertimos mucho en sangre y en mano de obra", resaltó Cornaglia.
"Contamos con 50-60 caballos de los cuales 10 están en competencia plena. De allí, yeguas madres que han sido campeonas, finalistas o semifinalistas", finalizó.