En Freyre, la obra pública se realiza con materiales que fabrica el municipio
Con la intención de reducir los costos que genera la contratación de empresas privadas, personal municipal de Freyre fabrica ladrillos huecos y premoldeados que se utilizan para la ejecución de obras públicas en el pueblo.
Debido a los altos costos que genera la contratación de empresas privadas para la ejecución de obras públicas para los pequeños municipios, Freyre encontró en la fabricación propia de materiales de hormigón y ladrillos una alternativa para poder cumplir con las mismas y a la vez, generar fuentes laborales.
Así, en marzo del año pasado, la gestión que encabeza el intendente Augusto Pastore reactivó el funcionamiento de la hormigonera, que estaba paralizada desde hacía más de ocho años, permitiendo la elaboración de hormigón para las obra de pavimento y bacheo. Cuatro meses después, incorporó la fabricación de ladrillos huecos y desde febrero de este año sumaron la elaboración de premoldeados destinados a obras de canalización.
Todo se utiliza para consumo propio, aunque no descartan a futuro una alternativa viable de comercialización, en lo que hace a los premoldeados, un mercado deficitario en la zona.
El obrador municipal funciona en el sector sureste del pueblo, más precisamente en calle Güemes e Italia. Allí trabajan unas ocho personas, cuatro dedicadas el funcionamiento de la hormigonera y cuatro, a la elaboración de los productos finales.
Ahorrar hasta un 80%
"Contar con una hormigonera nos permite ahorrar entre un 40% y 50% de costos, en el caso de los ladrillos, siendo que en los pre moldeados el porcentaje asciende al 70%-80%", expresó el secretario de Obras y Servicios Públicos, Germán Baldo.
En declaraciones a LA VOZ DE SAN JUSTO, el funcionario municipal destacó que "todo se utiliza para consumo propio. En el caso de los ladrillos, se provee a familias carenciadas en el marco del programa municipal ´Te damos una mano´, tendiente a ayudar a que los vecinos cuenten con su casa propia, asimismo en planes de viviendas municipales o cualquier otra obra que sea necesaria", explicó Baldo.
En lo que hace a la fabricación de premoldeados, una actividad recientemente incorporada, el secretario de Obras Públicas comentó que "la iniciativa nace con la intención de dar respuesta al pueblo en una obra tan necesaria como son los desagües, teniendo en cuenta que ya no podemos soportar otra inundación. Como la tercerización de la obra de canalización es inalcanzable para municipios chicos como el nuestro, decidimos buscar una alternativa aprovechando la mano de obra municipal disponible".
"En esto recibimos el asesoramiento de dos ingenieros de la ciudad de San Francisco, quienes además capacitaron al personal en la confección de los premoldeados", agregó.
"Además, esto genera nuevos puestos de
trabajo para vecinos del pueblo, en un momento donde la situación laboral es
complicada en todo el país", sostuvo Baldo.
Son alrededor de 1.000 ladrillos diarios los que fabrica el municipio, alcanzando 20.000 en un mes
Más de 20.000 ladrillos mensuales y creación de mano de obra
Consultado sobre el funcionamiento de la planta, Baldo explicó que "en el obrador son ocho las personas que trabajan, cuatro afectadas al funcionamiento de la hormigonera y otros cuatro la fabricación de ladrillos y premoldeados ".
Trabajan de lunes a sábados, 6 a 13 y se producen alrededor de 1.000 ladrillos y 6 premoldeados por día".
En esto aclaró que "los días que se hacen premoldeados no se fabrican ladrillos y eso depende de la demanda de cada material. En este momento, por ejemplo, nos urge terminar la red de desagües internos, por lo que todo el personal está afectado a la producción de premoldeados".
"En épocas como estas, la producción puede alcanzar los 140 premoldeados al mes. Siendo que cuando se produce ladrillos, sólo se trabajan 5 días, y se fabrican alrededor de 20.000 ladrillos mensuales", puntualizó el funcionario municipal.
Posteriormente destacó la predisposición y el trabajo del personal municipal, que permite alcanzar las metas de producción diaria y con el dinero recaudado, adquirir una nueva máquina mezcladora y una que produce ocho ladrillos por tirada.
Asimismo, comentó que "la hormigonera es mecánica, pero para agilizar la producción la estamos convirtiendo en hidráulica".
Finalmente, Baldo manifestó que "si bien todo de usa para consumo propio, la idea a futuro es vender los premoldeados que se trata de un mercado poco desarrollado en la zona".