El kit de aterrizaje en Punta del Este exige cero de alcohol al conducir y saludar antes de preguntar
Pasada la Navidad, y recuperados de sus efectos, los argentinos empezaron a llegar masivamente a Punta del Este. La desorientación reina, aprender o retomar los códigos del lugar lleva un tiempo. Hay normas de tránsito y costumbres diferentes, los controles de alcoholemia son estrictos y los hospitales no atienden a extranjeros. Por suerte los argentinos, ahora, cuentan con un consulado activo en Maldonado y Rocha.
BUENOS AIRES (Télam)-. Pasada la Navidad, y recuperados de sus efectos, los argentinos empezaron a llegar masivamente a Punta del Este. La desorientación reina, aprender o retomar los códigos del lugar lleva un tiempo. Hay normas de tránsito y costumbres diferentes, los controles de alcoholemia son estrictos y los hospitales no atienden a extranjeros. Por suerte los argentinos, ahora, cuentan con un consulado activo en Maldonado y Rocha.
Hay algunas cosas que conviene saber cuando se viaja a Uruguay. Lo primero: el tipo de cambio, que está en 1,50 a la compra y 2,20 a la venta, en pantalla, lo que significa que en algunos negocios hacen una "gentileza" y cambiarán a 1,80 y hasta a 2, en raras ocasiones.
Siempre insistir tiene efectos en un lugar donde los que lo atienden a veces también son argentinos o viajan mucho a nuestro país.
"Voy a Buenos Aires todos los meses a ver a mi nieta y si voy a tener que comprar a 2,20 me conviene aceptarles a los argentinos a 2. Es una rebajita para ellos y una solución para mí", dice Mónica, que tiene una boutique en la calle 20.
En definitiva los argentinos optan por cambiar dólares a uruguayos y luego dividir entre dos para saber, más o menos, lo que están pagando por las cosas.
Diana, que está pasando unos días antes de que se alquile su departamento, comenta: "No se puede andar con una calculadora todo el tiempo, yo divido el precio en uruguayos a la mitad y listo. Si son 580 ó 600 uruguayos, le calculo 300 argentinos".
Desde este año, al promulgarse la ley N°19.360, se redujo a cero gramos por litro de sangre el nivel de tolerancia de alcohol permitido a los conductores de vehículos y están aplicando la medida con mucho rigor, reteniendo el permiso de conducir durante 6 meses a quienes pasen este límite, la primera vez, y a la segunda infracción, se lo quitan de por vida.
Hasta el año pasado la tolerancia era de 0,3 gramos por litro de sangre, lo que permitía tomar una o dos copas de vino en la comida, si se dejaba pasar un rato antes de conducir. Ahora el cero es terminante.
"Los restaurantes nos hemos cansado de elevar protestas porque ha bajado sustancialmente el consumo durante las comidas, dijo hoy a Télam Luciano, de Il Encanto. Pero la notoria disminución de accidentes demuestra que esta ley, por muy molesta que sea, no es irracional.
Los uruguayos ya se acostumbraron. "A mí ya me sacaron el permiso una vez, la próxima me lo retiran para siempre, así que si quiero tomar me tomo un taxi", comenta el operador inmobiliario Roberto Berro.
Hay otras normas a tomar en cuenta. Por ejemplo en Argentina, en las rotondas, la prioridad la tiene quien viene por la derecha; en cambio, en Uruguay, la tiene quién está ya en la rotonda, por lo que en estos primeros días de temporada suele haber muchos accidentes y discusiones acaloradas.
Otras normas implacables para Uruguay -y que en Argentina no tienen tanto peso- son: no hablar por celular manejando y parar en los carteles de Pare o de Ceda el Paso. Aunque no pase nadie, aunque sean las dos de la tarde y el sol queme las calles, hay que parar en los carteles y ceder el paso a los peatones que crucen por las cebras. No hay tutía.
"Fui a ver a un colega que era jefe de prensa del intendente, por una multa carísima que me pusieron por no parar en un cartel de Ceda el Paso, en Maldonado, un día que no había nadie en la calle, y no hubo caso", confiesa apesadumbrado Alberto, periodista argentino que veranea en La Barra.
Otra de las diferencias que hay entre las dos orillas, que está basada en la costumbre, es la de saludar antes de preguntar algo a alguien en la calle, o a un vendedor en un negocio. No existe esa costumbre tan porteña de atender a dos o tres personas al mismo tiempo y de taquito. Aquí hay que hacer cola, esperar el turno y saludar siempre al iniciar una relación de cualquier tipo: con el portero, el cadete, la cajera, la vendedora, el chico del quiosco o el anciano sentado en un banco de la calle a quien se le va a preguntar una dirección.
Eso de "¿sabés cuál es la calle 30?" dicho desde la ventanilla y al pasar, cae mal. Y no es chiste, porque esa persona con la que uno se enemista será la que mañana lo atenderá en la oficina telefónica cuando busque una solución a su celular, o el mozo en el restaurante donde vaya a cenar y ahí, tendrá su gloriosa hora de la venganza.
Una advertencia a tener en cuenta es que la salud pública en Uruguay no contempla la atención a extranjeros, ni siquiera a uruguayos que no tengan un permiso especial para atenderse en hospitales públicos. Y es bueno saber que la consulta con un médico cuesta cien dólares y que, si además entra algún costo hospitalario, en alguno de los sanatorios privados, la suma se duplica.
Es decir, curar un porrazo, en donde haya que poner algunos puntos, puede costar más de 200 dólares. De todas formas hay algunas coberturas argentinas como Osde o Emergencias que tienen acuerdos que conviene activar antes de salir.
Para tranquilidad del viajero, hay consulados argentinos en toda la zona de contacto con Uruguay: en Salto, en Paysandú, en Fray Bentos, en Colonia, en Montevideo y desde hace cuatro años también hay un activo consulado en Maldonado, que abarca hasta Rocha. (Te 42221195 y 096 123 640).
La recomendación consular para los viajeros es que saquen fotocopia de sus documentos, y se muevan con eso dejando a resguardo la documentación auténtica que le permitirá regresar a casa; y ante cualquier inconveniente, robo, detención o accidente, pedir que le avisen a su Consulado, que interviene de inmediato.
Hasta abril de 2017 hay beneficios para los turistas no residentes, como ser: devolución del IVA por servicios turísticos y pago con tarjetas de crédito/débito emitidas en el exterior, lo que incluye desde gastronomía, catering y fiestas, hasta el arrendamiento de vehículos sin chofer.
También hay devolución del 10,5% del precio abonado con crédito/débito por tarjetas emitidas en el exterior, en inmobiliarias registradas; 24% de descuento en combustibles, con tarjetas crédito/débito extranjeras, en estaciones hasta 20 km de los pasos de frontera; Tax Free en comercios adheridos al sistema; IVA cero en hoteles; y los peajes pueden pagarse en pesos argentinos, uruguayos, dólares y reales.
En la agenda para este lunes 26 figuran, a las 19, el Concierto de Navidad por la Orquesta departamental en José Ignacio, con entrada gratuita; y a las 20, la inauguración de la exposición de Sandra Vázquez en la Liga de Punta del Este, también gratis.