Dos abuelos que iban a la Mesa Digna consiguieron un hogar
Julio y Osvaldo dejaron de ir los viernes pero no porque no pudieran sino porque encontraron un espacio donde son contenidos comen diariamente y duermen bajo techo. La campaña les permitió salir de la calle.
Las historias de la Mesa Digna siguen replicándose. Desde que en abril Red Solidaria inició este proyecto para dar una cena nutritiva y compuesta a las personas en situación de calle todos los viernes por la noche fueron muchos hechos los que se conocieron.
Entre ellos está la historia de Julio y Osvaldo que eran dos de los primeros comensales que tuvo esta mesa instalada en la Plaza General Paz. Desde hace un tiempo los dos hombres mayores dejaron de ir a sentarse allí y le cedieron el lugar a otras personas, no porque sí sino que en realidad consiguieron un hogar donde pasar las noches.
Gracias a la solidaridad de las personas los hombres dejaron la calle y ahora viven, duermen y comen en un hogar que les permitió mejorar su calidad de vida. La Mesa Digna los unió e hizo conocida su situación pero fue la gente la que les dio un nuevo destino.