Día del Camionero: una actividad que requiere cada vez de mayores medidas de seguridad
Lucas Brunetto contó su experiencia e hizo foco en los aspectos de seguridad en las rutas.
Tal como ocurre cada 15 de diciembre, hoy se celebra en todo el país el Día del Camionero, en referencia a esa fecha del año 1967, cuando se realizó el Primer Convenio Colectivo de Trabajo, que incluyó al sindicato que nucleaba a los choferes de camiones de la Argentina.
Desde ese entonces, la fecha quedó establecida como una costumbre. Sin embargo, llegar a ese momento no fue sencillo. El Sindicato de Camioneros ya había sido creado el 16 de marzo de 1943, realizándose a partir de dicha fecha un trabajo constante en la defensa de las condiciones laborales y en la reivindicación de los salarios a los trabajadores camioneros, y en 1955 obtuvo su personería gremial.
Luego, en 1965 se creó la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros y Obreros del Transporte Automotor de Cargas, que agrupa a todos los gremios del país y recién dos años más tarde se logró unificar las condiciones laborales de todos los trabajadores del país con la celebración del Convenio Colectivo de Trabajo.
El eje fundamental de las cargas de nuestro país se concentra sobre el camión, que representa cerca del 92% del transporte interno argentino. Detrás de este importantísimo medio logístico se encuentra el transporte ferroviario, y en una considerable menor medida, el transporte aéreo de cargas.
En ese contexto el sistema de rutas que conectan las diferentes localidades de nuestro país resulta de vital importancia para el desarrollo de nuestro sistema de transportes donde las cargas de todo tipo de mercaderías brindan un sostenido crecimiento a nuestra economía.
LA VOZ DE SAN JUSTO dialogó con Lucas Brunetto, un transportista de 34 años que hace 7 años que se dedica a esta actividad transportando diariamente mercaderías hacia diferentes destinos.
En un alto dentro de su tarea en la ruta, Brunetto remarcó la importancia de contar con mecanismos de seguridad que brinden mayor confiabilidad a la tarea del transporte con el claro objetivo de reducir los índices de accidentes en ruta.
Sobre esto comentó que "hay empresas que exigen un máximo de horas de trabajo para cada transportista y quienes más lo exigen son aquellos que transportan combustibles por ser mercancía peligrosa. En ese caso por cada tres horas de viaje deben parar media hora para descansar y para garantizar que eso se cumpla cada unidad es controlada mediante un sistema de GPS satelital".
Igualmente comentó que en casi todos los casos "cuando se traza la hoja de ruta en la empresa cada transportista tiene previsto su descanso y el lugar donde va a parar para eso".
En algunas ocasiones, hay camiones que vienen equipados con discos rígidos unidos al cuenta vueltas del camión. "Este mecanismo permite marcar la velocidad mínima y máxima en el trayecto recorrido, el tiempo que el vehículo se mantuvo parado el camión, etc y eso es controlado por la Cnrt y la Gendarmería".
"En caso de que nos encontremos con un control de Gendarmería me pueden pedir los datos que están en el disco del tacógrafo y allí pueden comprobar cómo se dio el movimiento del trayecto que estuve recorriendo, incluyendo la velocidad y el tiempo en que estuvo en movimiento el camión".
Luego reconoció que los controles para el transporte de cereales y cargas generales "se suelen flexibilizar un poco más al no ser considerada una carga peligrosa. En este caso no se suele controlar el horario o la frecuencia de descanso".
Para evitar este tipo de situaciones que puedan derivar en algún accidente como el ocurrido el pasado 30 de noviembre cuando un camión cargado con piedras chocó las cabinas de peaje de la estación ubicada en Colonia Malbertina, en las inmediaciones de Devoto estimó que "debería nacer desde la misma empresa propietaria de los camiones o bien de los propietarios de la mercadería que se transporta una manera de garantizar este tipo de controles".
En este caso recordó que se dan casos en los que "algunas empresas piden el funcionamiento del tacógrafo que regula el tiempo de actividad realizada en el camión de manera continua además de tener un registro cabal del recorrido. Otras empresas exigen hasta el remito de la carga. En este caso son controles, pero suelen ser escasos".
Tras reconocer que en el ámbito de San Francisco "las fuerzas de seguridad como Gendarmería controlan bastante la actividad del transporte de cargas" aunque luego aclaró que en su mayoría "se centran sobre todo en la documentación como las hojas de ruta, el psicofísico, las técnicas del vehículo, pero nadie pide el tacógrafo".
En cuanto al estado general de los vehículos que transitan por las rutas de nuestro país, el entrevistado reconoció que "hay de todo. Lamentablemente el que tiene un camión de muchos años no tiene muchas facilidades para cambiar esa herramienta de trabajo. Si bien no se exige una antigüedad máxima en las unidades, ahora están limitando la circulación en base a una relación de peso/potencia donde dependiendo de los caballos de fuerza que tenga el vehículo será la cantidad máxima de kilogramos a transportar".
El presente de la actividad
Al momento de analizar cómo se encuentra la actividad del transporte de cargas en nuestro país explicó que "en este último tiempo hubo muy poco movimiento de camiones para sacar el trigo y ahora se viene el maíz y la soja para lo cual se espera que suba un poco el rinde de estos dos productos".
Pese a ello explicó que el rubro de los agroquímicos y el transporte de este tipo de mercadería "se está moviendo bastante" mostrando de esta manera que "el movimiento que observamos nos indica que hay trabajo".