Detuvieron a tres morterenses cuando intentaban cometer una supuesta estafa en San Genaro
La estafa era en perjuicio de la dirigencia de clubes que militan en la Liga Totorense de la provincia de Santa Fe.
Tres personas con domicilio en la ciudad de Morteros fueron detenidas el viernes último en la ciudad santafesina de San Genaro cuando pretendían concretar una estafa en perjuicio de la dirigencia de clubes que militan en la Liga Totorense de la provincia de Santa Fe.
Los hábiles delincuentes pusieron en práctica un ingenioso "cuento del tío", se contactaron con dirigentes de los clubes Sportivo Rivadavia de San Genaro y Defensores e Independiente de la localidad de Centeno.
A la primera entidad, el presunto árbitro le solicitó la suma de 30 mil pesos, en tanto que los dos clubes de Centeno al primero, 28 mil pesos y 25 mil pesos al segundo.
Diego Budacci, dirigente del Club Sportivo Rivadavia de San Genaro, contó a Radio Centro de Morteros lo ocurrido: "El viernes se comunicó una persona conmigo, me dijo que era el árbitro Diego Ramírez, quien manifestó que tenía un compañero de trabajo que tenía un hijo con serios problemas de salud". "Estamos viendo si un par de clubes no nos pueden adelantar el pago de algunos partidos para de este modo poder realizarle la operación a su hija", continuó el árbitro. Entonces el dirigente le informó a su interlocutor que lo iba a consultar con el resto de los dirigentes de la entidad deportiva.
El directivo de la institución agregó que cuando vio la característica del número del que le estaban efectuando la llamada sospechó de la misma. "Me doy cuenta que no pertenecía a la ciudad en donde reside el árbitro Ramírez". Budacci decidió entonces llamar al árbitro, el cual había cambiado el número de su celular y éste le informó que nada tenía que ver con lo que sucedía".
Ante esta situación el dirigente se puso en contacto con las autoridades policiales de la comisaría 6ª de San Genaro, quienes le aconsejaron continuar con la charla, simular que aceptaba y de este modo poder detener a los delincuentes. Fue así que el día viernes, el presunto árbitro Ramírez se comunicó con el directivo y éste le manifestó que el resto de la dirigencia del club estuvo de acuerdo en adelantar el pago de varios partidos, que el dinero lo tenía consigo y que solo había que fijar un lugar en donde encontrarse.
El falso árbitro antes de cerrar la conversación le dijo que le agradecían el gesto y que ellos se iban a acordar del mismo en lo que restaba del torneo.
Los efectivos policiales montaron un discreto operativo policial en torno al lugar en donde se iba a producir el encuentro y llegaron tres individuos a bordo de un automóvil pero solo uno descendió en busca del dirigente. Allí fue cuando el personal policial intervino, detuvo a los tres hombres y secuestró el automóvil.
Los tres quedaron detenidos a disposición del fiscal de instrucción del lugar y al aguardo de la realización de la audiencia imputativa, aun que no trascendieron las identidades de los detenidos.
Los sujetos, que poseerían frondosos antecedentes penales, fueron imputados como supuestos autores del delito de "tentativa de estafa".