Deep fake: otra cara de la desinformación
Desde Barack Obama hasta la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cada vez son más los ejemplos de personas que se convierten en fakes populares a través de las redes. Sin embargo qué es y cómo funciona eso sí sigue siendo algo que no muchos saben.
Parece un juego de palabras pero no lo es, los videos falsos y las noticias que circulan en el mismo sentido solo contribuyen a la desinformación, y así deberían ser evaluadas para tomar conciencia de un problema del que todos hablan pero no se comprende muchas veces.
Esta semana un video desvirtuado que tenía como protagonista a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, puso un nuevo término en circulación: deep fake. El material audiovisual que se hizo viral pasó de ser un meme por el estilo de peinado de la funcionaria a un fake donde se escucha un tramo de la conferencia que brindaba por un operativo de narcotráfico en donde su voz se asemejaba a la una persona alcoholizada.
Lo cierto es que cualquier persona con habilidades de programación y conocimiento de las herramientas que ofrecen las nuevas tecnologías puede hacer un producto de este tipo, pero el problema se traslada entonces a cómo ocultan su identidad y la forma en que éste se reproduce no ya como "algo gracioso" sino como información basada en hechos falsos o adulterados como en este caso.
Qué es un Deepfake
Una mentira profunda o deepfake se basa en realizar un producto nuevo mediante el cual una persona hace un montaje de voz implantando así un discurso adulterado, o lo que es lo mismo cosas que nunca dijo.
Lo mismo se puede hacer con las imágenes transformando fotos normales en desnudos y ponerlas en circulación como material real o usarlas para darle una suerte de "sostenimiento gráfico" a contenidos informativos falsos.
Un verdadero deepfake emplea la Inteligencia Artificial y la combinación con algoritmos para poder no solo distorsionar sino completar con alta calidad un producto completamente falso. Como alternativa, existen aplicacionescomo Fakeapp o FaceSwap que hacen un trabajo similar y sirvieron para popularizar el término aunque estrictamente no son un ejemplo de ello.
El video de Bullrich es simplemente una ralentización del audio en el que ella habla pero no deja de ser falso y preocupar teniendo en cuenta que más allá del "profesionalismo" que intervenga en su realización sigue siendo un ejemplo más de desinformación.