Dar la mamadera, una decisión que no te hace mala madre
Los beneficios de la lactancia materna no se discuten, pero muchas veces las mujeres no pueden amamantar a sus hijos por cuestiones de salud o simplemente porque eligieron no hacerlo debido a distintas circunstancias de su entorno familiar, laboral y social. Florencia Barotto Ribba y Ornella Poli contaron su experiencia dejando en claro la importancia de poder elegir y remarcaron que la decisión que tomaron no anula la elección de amamantar de otras mujeres.
Isabel Fernández|LVSJ
Desde el embarazo, amamantar está en las prioridades de casi toda madre, sin embargo, elegir no hacerlo no debería ser considerado como una decisión irresponsable o egoísta.
La Organización Mundial de la Salud recomienda que las madres amamanten a sus bebés desde la primera hora de vida, que solo les alimenten con leche materna hasta los seis meses, y que continúen haciéndolo, con otros alimentos adecuados, hasta los dos años.
Los beneficios de la lactancia materna no se discuten, pero muchas veces las mujeres no pueden amamantar a sus hijos por cuestiones de salud o simplemente porque eligieron no hacerlo debido a distintas circunstancias de su entorno familiar, laboral y social.
Florencia Barotto Ribba decidió alimentar a su bebé Gino de 10 meses solo con leche de fórmula y Ornella Poli, que tiene a Benicio de 3 años y a Santino de 2, encaró con ambos una lactancia mixta -es decir una parte de lactancia materna y la otra con leche infantil- que con el tiempo se fue centrando en la fórmula.
Ambas contaron su experiencia a LA VOZ DE SAN JUSTO dejando en claro la importancia de poder elegir y remarcaron que la decisión que tomaron no anula la elección de amamantar de otras mujeres, haciendo hincapié en que "la leche materna es lo mejor para los bebés".
"No tengan miedo de decidir lo que quieran y consideren que es lo mejor para ellas mismas y sus bebés, tampoco teman a ser juzgadas porque todas merecemos tener una maternidad respetada y que no se sientan mal o menos madres por no amamantar y elegir lo que quieren para sus hijos", aseguró Florencia quien comentó que su decisión de darle leche de fórmula a su bebé fue personal.
Comentó: "Quería volver a trabajar y estudiar y siento que la lactancia materna genera todo un proceso por el cual yo no quería pasar. De todas maneras sé que la leche materna es el mejor alimento para el bebé".
Aseguró que personalmente no vio nada de malo en darle fórmula. "Muchos bebés toman la leche de fórmula y crecen sanos también. Tomé esa decisión y lo bueno es que mi entorno me apoyó, nadie vino a presionarme".
Admitió que al principio "tenía miedo de no generar el vínculo con mi bebé pero la verdad que eso no pasó, el vínculo es fuerte con mi bebé porque ellos saben quién es su mamá, el vínculo no cambió en nada".
"No todas podemos o queremos"
Ornella aseguró que la leche materna es lo mejor y lo más sano para el bebé, "admiro y felicito a las mujeres que logran tener una lactancia materna exitosa, pero en mi caso no pude amamantarlos. Al principio me sentí culpable, se dice que si no das la teta sos mala madre pero no es así. No todas podemos o queremos y no hay que cargar con la culpa porque yo hago lo mejor para mis hijos ya sea que le dé teta o leche de fórmula".
Al contar cómo fue estableciendo la alimentación de sus pequeños dijo que la llegada a la leche maternizada "se dio porque tenía muchos problemas para dar la teta, me costó mucho que se prendan al pecho, probé con pezoneras, hice una consulta con puericultoras que me ayudó muchísimo, renegaba mucho tenía poca leche, no se llenaban y entonces no pude seguir amamantándolos con mi leche exclusivamente".
"Solos fueron dejando de pedirme la teta y se volcaron más a la leche de fórmula y ahí decidí seguir con la mamadera", recordó.
En cuanto al vínculo con el bebé dijo que pudo forjarlo igual. "Cuando se está con el bebé se comparte tiempo, se está creando un vínculo porque hay amor", dijo.