Cuestionan informe nacional que señala bajo rendimiento de la mitad de los universitarios
Las dudas surgen desde San Francisco en base a índicesdifundidos por la Universidad de Belgrano. Desde el Cres sostienen que son pocos los estudiantes que no aprueban una materia por año.
Una materia aprobada por año. Esa estadística reveló esta semana un informe del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA), la cual indica que el 45,5 % de los estudiantes universitarios tienen ese promedio de aprobación en las casas de altos estudios del país tanto, públicas como privadas.
Entre las mejores -detalla el informe- se encuentran en el sector público la Universidad Nacional de Villa María (Unvm), a la cual CEA ubica tercera, y la UTN, en el octavo lugar. Las que tienen índices más altos son la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Jujuy y Salta.
Pese a esto, tanto para el decano de la Facultad Regional San Francisco, Alberto Toloza, como para el rector de la Unvm (se encuentra dentro del Centro Regional de Educación Superior en San Francisco), Luis Negretti, los datos son "cuestionables", ya que esto indicaría que la casi la mitad de la población universitaria tardaría décadas en graduarse y los estudiantes serían crónicos en su mayoría.
El informe del CEA difundido esta semana se basó en el Anuario Estadístico Universitario publicado por el Ministerio de Educación de la Nación en 2015. Allí verificaron que la cantidad de alumnos reinscriptos en universidades estatales y privadas aquel año fue de 1.411.164 y el 45,5 % de ellos (642.783) no había aprobado más de una materia el año anterior. Mientras que el 19 % de los anotados en aquel momento (264.886) rindió con éxito seis o más materias en el anterior ciclo lectivo.
Tanto Toloza como Negretti sostuvieron aLA VOZ DE SAN JUSTOque "no existe un nivel tan alto de casos donde se rinda solo una materia por año" y lo contrastaron en la provincia de Córdoba con dos hechos.
Por un lado, la obligatoriedad de rendir dos materias al año para poder reinscribirse al siguiente ciclo lectivo que establece la ley de Educación Superior y, por el otro, la pérdida de beneficios utilizados como el Boleto Educativo Gratuito (BEG) entre los estudiantes, becas o residencias.
Dudas sobre la investigación
En el caso de las universidades que pertenecen a la órbita pública, de la totalidad de estudiantes reinscriptos en universidades nacionales de gestión estatal, el 49,57 % aprobó sólo una o ninguna materia en el ciclo lectivo anterior.
Con este dato es que surgen las principales contradicciones. El primero en alzar la voz fue Negretti, quien dijo ante la consulta de este diario: "Yo me permito poner en duda la composición de esa investigación porque no sabemos bien cuáles son las variables que se tuvieron en cuenta". E insistió en que los reparos también obedecen a que el director del CEA, Alieto Guadagni, "tiene una mirada crítica y negativa acerca de cómo funciona el nivel superior".
Luego afirmó que "no existen estudiantes que rindan una materia por año", porque en tal caso "se les da por vencida su inscripción en la carrera"; y en el caso de la Unvm los estudiantes deben, para mantener la regularidad y poder reinscribirse, aprobar mínimamente dos materias por ciclo lectivo.
Negretti también señaló la presencia de otro factor dentro de las universidades que contrarresta estos datos: "En los últimos años, la estructura de las carreras pasó a ser más cuatrimestral apuntando a que se tarde menos en hacerla. De otra manera, tardarían décadas en terminar si las asignaturas fueran anuales, por eso personalmente me atrevo a ponerlo en dudas al informe".
En la UTN son muy pocos
En el caso de los estudiantes tecnológicos de la facultad local, Toloza analizó también puntillosamente el informe. En primer lugar, recordó los parámetros legales existentes: "La ley de Educación Superior establece que todo alumno para mantener su regularidad debe aprobar dos materias por año, si un alumno no lo hace queda inactivo y pierde su estatus académico".
Debido a lo que indica el sistema con estas condiciones, un estudiante no podría volver a intentar reinscribirse al año siguiente si solo rindió una materia en un ciclo lectivo.
El ingeniero también sostuvo que en su caso, "los planes de estudio -según las carreras - contemplan hasta un 50 % de materias anuales". Teniendo en cuenta este factor dio cuenta de la estadística que tienen realizada: "En nuestro caso son contados los estudiantes que solo aprueban una materia al año, aquí de diez alumnos solo dos podrían estar dentro de los valores que arrojó este informe. Un porcentaje muy por debajo de lo que dice lo publicado", fundamentó.
¿Entre las mejores?
El CEA sostiene que los porcentajes más bajos de estudiantes que rinden una materia al año los tienen la Universidad Tres de Febrero, de las Artes y la Unvm. Cuando Negretti puso en tela de juicio el informe, lo tuvo en cuenta y comentó: "Así como cuestiono los resultados finales sobre que la mitad no rinde ni siquiera una materia, también cuestiono que la Unvm esté entre las mejores porque no se conoce ni la intencionalidad, ni las variables utilizadas para hacerlo".
Empero, también subrayó que existe otro dato "extraño" de este informe porque comparando el total de las universidades estatales con las privadas el mayor porcentaje está en las primeras: 49,57 % y 29,6 %, respectivamente.
Si se tienen en cuenta estos dos totales "no sería posible" que tres universidades públicas tuvieran los índices más bajos. Y esto queda en evidencia con lo dicho por el rector de la institución villamariense, con sede en San Francisco: "Por esto insisto con que detrás del informe existe una intencionalidad para su elaboración, pero además no conocemos qué variables y sobre qué bases trabajaron".
El abogado refiriéndose a las instituciones privadas de nivel superior dijo que "esto tampoco cree sea posible" principalmente porque allí asisten alumnos que pueden pagar aranceles altos por mes y se dedican - mayoritariamente - solo a estudiar.
"No se puede pensar que sus familias no seguirían pagando cuando no rinden ninguna materia al año", enfatizó Negretti y continuó diciendo: "En las públicas se puede planificar más a largo plazo la graduación porque algunos tienen familias, trabajan y lo hacen en trayectos más prolongados, pero nunca rindiendo menos de dos materias al año", insistió.
Más allá de los estudiantes crónicos
Ninguno de los entrevistados negó la existencia de los denominados "estudiantes crónicos" que existen dentro del sistema educativo universitario, sin embargo, resaltaron algunas circunstancias que contribuyen a su existencia y que se presentan en las casas de estudios que dirigen.
Puertas adentro en estas instituciones educativas se implementan herramientas para acompañar a los estudiantes con la cursada y sortear con éxito la cantidad de exámenes finales que más puedan.
En el caso de la UTN, Toloza explicó que se dan dos fenómenos dentro de su facultad. Describió primero la existencia del "desgranamiento" en los primeros años de las carreras y, en el otro extremo de tercer año en adelante, "la disminución del volumen de estudiantes por curso" que incide directamente en la cantidad de graduados de acuerdo a los tiempos esperados.
"Producto de este desgranamiento en UTN, en general, cuando no logran avanzar estos chicos dejan la universidad. En cuanto al porcentaje de egreso, éste siempre es menor al de ingresantes, pero es algo histórico", sentenció.
Para evitar la deserción masiva se apela a las tutorías desde la misma facultad, pero también a través del Estado, como sucede a partir de este año con el programa "Tutores pares". Sin embargo, cuando promedian la mitad de la carrera "muchos chicos comienzan a trabajar porque existe una demanda de las empresas" y esto hace que "terminen dilatando los tiempos de estudio".
Guadagni criticó el sistema actual de ingreso
El director del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA), Alieto Guadagni, defendió en una entrevista con la emisora radial Cadena 3 los datos del estudio de la entidad dependiente de la Universidad de Belgrano.
"El punto débil es la universidad. La Argentina es uno de los países de América Latina que tiene más estudiantes universitarios y menos graduados. Nuestro país tiene, en proporción, más estudiantes que México, Colombia, Brasil y Chile, pero menos egresados que esos países", afirmó.
Al igual que en otras ocasiones, volvió a insistir que el principal problema para esto es el "acceso irrestricto a la universidad", lo que no sucede en países como México, Colombia, Brasil, Chile, Asia y Europa.
En ese sentido, remarcó: "En el mundo hay dos maneras de pasar de la secundaria a la universidad: el modelo mundial y el argentino".