Controles auditivos: en qué etapas de la vida deben hacerse
Una buena salud auditiva nos permite conectarnos con la familia y desarrollarnos en la comunidad. Por eso es fundamental el control auditivo a lo largo de la vida para la detección temprana de las hipoacusias o sorderas lo que permite adoptar un seguimiento adecuado.
Aunque la
pandemia por covid-19 obligó en el último año a modificar la atención y
establecer prioridades permaneciendo junto a las familias para estimular el
desarrollo de los niños con problemáticas de aprendizaje, emocionales o de
audición, el Cemiri San Francisco continúa realizando controles de otoemisiones
acústicas a bebés y audiometrías consideradas prioritarias, en esta época a los
niños que ingresan a la escolaridad.
De la población testeada hasta el día de la fecha, solo un 4 % presentó alguna dificultad de característica unilateral y leve, por lo que se realizó la derivación correspondiente para luego continuar con la evaluación.
En el marco del Día Mundial de la Audición, que se conmemoró el pasado 3 de marzo, los profesionales de la salud remarcaron la importancia de realizar controles auditivos en todas las edades ya que "aseguran la detección e intervención oportuna y permiten un seguimiento adecuado".
¿Cuáles son las etapas estratégicas de la vida para hacerlos?. La fonoaudióloga Andrea Ayala, del equipo del Cemiri, que está bajo la órbita de la Secretaría de Salud, detalló en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO cuáles son las edades en las que se deben realizar, desde el nacimiento hasta la adultez.
Ayala explicó que el primero de los controles se realiza de manera universal antes del primer mes de vida con la toma de las otoemisiones acústicas (OEA). "El Programa de Detección Temprana y Atención de la Hipoacusia, cumple con este propósito a través del cumplimiento de las fases según la situación que se deba analizar en función de los resultados del estudio".
Esta demanda es constante y articulada actualmente con el personal del Hospital Iturraspe que también realiza el estudio pero debido a la atención por el coronavirus por el momento suspendió el servicio.
"Acompañamos a los pediatras en el control del niño sano, y realizamos el estudio a aquellos bebes que tenían pendiente las OEA o debían repetirlas. Una vez entrado el año, y ya nuevamente en nuestra institución comenzamos con otros estudios audiométricos para aquellos casos en que fuesen solicitados como prioritarios", afirmó la profesional.
Ayala afirmó que para los chicos que no presentaron inconvenientes luego del primer control de bebé "se vuelve a repetir el estudio audiométrico al ingreso escolar de primer grado, después continuamos cuando llegan primer año del nivel medio y al ingreso de algunos estudios terciarios. Este seguimiento nos asegura un control periódico, si surge la necesidad de adelantar algún control, queda supeditado a situaciones particulares e individuales y con derivaciones al especialista otorrinolaringólogo".
En el caso de los adultos que estén expuestos a ámbitos ruidosos como por ejemplo las fábricas, "las recomendaciones son cumplir con la higiene y seguridad que determina la protección adecuada que deben utilizar, y realizarse controles periódicos. También se realizan audiometrías a adultos por derivaciones médicas", dijo la fonoaudióloga.
Estrés y cansancio auditivo
En este año de pandemia, el uso de la tecnología se profundizó. La utilización prolongada de auriculares y de múltiples dispositivos al mismo tiempo como tablets, celulares, computadoras, etc. provocaron estrés y cansancio auditivo.
"Todos conocemos lo poco beneficioso que es utilizar los auriculares a intensidades poco apropiadas, pero tal vez en este caso más que las altas intensidades, creo que lo que aquí se sumó, fue el tiempo prolongado en el uso, y el estrés auditivo que provocó el uso de múltiples dispositivos al mismo momento, - con superposiciones de sonidos, de voces, la poco calidad, distorsiones-. Todo eso generó cansancio auditivo", advirtió Ayala.
Por otro lado la fonoaudióloga recordó que para prevenir los problemas auditivos "son fundamentales los controles prenatales y la vacunación ya que existen enfermedades que pueden provocarlos".
"Es fundamental ya que hay enfermedades o Infecciones intraútero como citomegalovirus, herpes, rubéola, sífilis y toxoplasmosis que pueden ser causantes de hipoacusias. También existen algunos medicamentos considerados ototóxicos que pueden provocar pérdida auditiva", dijo.
La situación en el país
En la Argentina, la discapacidad auditiva constituye el 18 por ciento de las discapacidades existentes, correspondiendo 86,6% a dificultad auditiva y 13,4% a sorderas. Unos 3 de cada 1.000 nacidos vivos en el país presentan algún grado de hipoacusia y su detección temprana se encuentra amparada bajo la ley 25.415. Se busca concientizar sobre la importancia de la audición y promover la audición y el diagnóstico oportuno de pérdidas auditivas, además de incentivar a la población para que se realice evaluaciones audiológicas periódicas.
El 60% de los casos de pérdidas auditivas en niños se trata de causas prevenibles. Todo recién nacido debe ser evaluado auditivamente y la detección temprana (ley 25.415), en forma adecuada y practicada a tiempo, puede facilitar a los niños y niñas con pérdida auditiva el acceso a la comunicación, educación y un empleo a futuro.
Concientizan sobre la detección precoz de problemas auditivos
Se otorgan turnos para asegurar el distanciamiento
Este año, los controles comenzaron con los ingresos escolares de primer grado, primer año y terciarios. Se continúan realizando los screening de OEA en los bebés y audiometrías por derivaciones médicas a la población en general.
Por la crisis del coronavirus se adaptó la modalidad de turnos: en lugar de ser por orden de llegada, ahora se otorgan solo de manera telefónica propiciando de esta manera menor flujo en la circulación de personas.
Ya con el turno asignado el niño concurre a su horario, respetando horario de ingreso y salida, con barbijo, con la compañía de un solo adulto y a cada uno de ellos se les realiza el control correspondiente de prevención del coronavirus, como se viene haciendo desde el comienzo de la atención presencial.
Para solicitar turno se debe llamar al teléfono (03564) 439130 de 7 a 12.