Con el locro anual, la Escuela Fava de Esteban sigue creciendo
La comunidad educativa de barrio Independencia llevó a cabo hoy su tradicional locro. Se vendieron 4.600 porciones y con lo recaudado se realizará el mantenimiento de la instalación eléctrica del edificio que tiene 25 años.
Uno de los principales desafíos que enfrenta año tras año todo establecimiento educativo tiene que ver con el compromiso de la comunidad educativa para trabajar en torno al crecimiento institucional.
La Escuela Marina María Magdalena Fava de Esteban, enclavada en el barrio Independencia, se ha convertido en un ejemplo de constancia y trabajo coordinado entre docentes, personal directivo y padres de alumnos que en conjunto desarrollan actividades que tienen como objetivo apuntalar el crecimiento constante que exhibe año tras año el establecimiento.
Con la venta de 4.600 porciones de locro realizado hoy domingo, la Asociación Cooperadora se aseguró el dinero para continuar trabajando en el mantenimiento de las actuales instalaciones y además les permite pensar en seguir acrecentando la superficie construida.
Los de ayer y los de hoy, todos colaboran
Actualmente, el establecimiento educativo tiene una población escolar de 360 chicos en los turnos mañana y tarde. Y se destaca a la escuela es la colaboración lograda por numerosos ex alumnos y sus padres quienes pese a los años que pasaron desde que sus hijos se alejaron de las aulas continúan trabajando para fortalecer el crecimiento de la institución.
Una tarea que une voluntades
El locro anual, que se programa todos los años cada segundo domingo de junio es un claro ejemplo del trabajo en equipo.
El trabajo comienza el sábado donde un grupo de 65 madres cortan todos los elementos necesarios para la preparación mientras que ayer, 80 padres se agregaron a la tarea desde la madrugada revolviendo la preparación, mostrando de esta manera el compromiso adquirido por la comunidad educativa.
El presidente de la Asociación Cooperadora, Fernando Vescovi, explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que "las familias responden con mucho compromiso y eso nos pone orgullosos porque muchos padres y ex alumnos siguen viniendo a colaborar porque se sienten parte de la familia de la escuela".
En este caso, las utilidades serán destinadas a renovar la instalación eléctrica, llaves y disyuntores del establecimiento que este año cumplió 25 años de fructífera trayectoria.
Por otra parte, el establecimiento educativo encaró la construcción de una nueva aula y pintó el techo de toda la escuela.
La directora del Nivel Primario, Gabriela Orellano, recordó que "la venta de porciones de locro es la única actividad que lleva a cabo la Cooperadora para recaudar fondos. Esto es algo característico del barrio que tiene lugar el segundo domingo de junio de cada año con una respuesta excelente".
"Es emocionante ver a todos compartir los momentos de la preparación del locro y hoy con todo lo que se está trabajando. Muchos de los que están aquí no tienen más sus hijos en la escuela y sin embargo siguen viniendo", añadió.
Se premia el esfuerzo
Como una manera de incentivar el trabajo que se lleva a cabo en la venta y preparación de las porciones de locro, la Cooperadora estableció un sistema de premios para aquellos que vendan mayor cantidad de porciones así como también entre quienes colaboran con la preparación.
Para este año, entre los padres colaboradores se sorteó un viaje para dos personas a Mendoza.
La nueva aula con la que cuenta la escuela
"Este trabajo en equipo da un excelente resultado y ese es el mensaje que transmitimos a nuestros estudiantes a quienes les señalamos que trabajando en equipo, apoyándonos unos con otros vamos a lograr excelentes resultados", finalizó Orellano.