Cómo la violencia emocional y el narcisimo pueden destruir la relación de pareja
Las personas narcisistas no tienen la capacidad de registrar las emociones del otro, no toman consciencia del daño realizado. Tampoco son capaces de sentir culpa o registrar su responsabilidad hacia su entorno. La licenciada Emilia Gobbo analizó cómo esta personalidad influye en la relación de pareja.
Vivimos en una sociedad que tiende a valorar el éxito y el poder. Tener una vida con las características socialmente esperables como ejercer una profesión, formar una familia, incluso llevar a cabo actividades solidarias o integrar instituciones con prestigio social brindan una imagen de reconocimiento.
Existen personas que cumplen con todos estos mandatos sociales, y además ofrecen una imagen social de integridad y honestidad, pero puertas adentro son altamente destructivas e incoherentes con los valores que aparentan profesar. Desarrollaron de manera exacerbada su el narcisimo, esto es, la admiración excesiva que siente una persona por sí misma, su aspecto físico o sus dotes o cualidades.
"Las personas narcisistas no tienen la capacidad de registrar las emociones del otro, no toman consciencia del daño realizado. Tampoco son capaces de sentir culpa o registrar su responsabilidad hacia su entorno. Generan un gran daño emocional en sus vínculos más cercanos y pueden llegar a destruir cada lugar al que llegan y cada persona con la que se relacionan", aseguró la licenciada en Psicología, María Emilia Gobbo (MP-6876) quien analizó en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO cómo esa personalidad influye en la relación de pareja.
- ¿Cuáles son las señales de que estamos frente a un narcisita?
Uno de los primeros indicadores de que estamos frente a una persona narcisista es la violencia emocional. Comienza de manera sutil y poco perceptible, se ejerce este tipo de violencia a través de la comunicación: el silencio, la indiferencia, las humillaciones y los chistes sutiles. Descalificaciones, y sarcasmo enmascaran un intento de dejar al otro en una posición de indefensión. Puede que en primera instancia estos mensajes sean tomados como chistes, pero después caemos en la realidad que esos chistes tienen algo de sentido. La comunicación no es directa y está cargada de dobles mensajes: dice una cosa, pero en los hechos ocurren otras, por ejemplo, le declara su amor incondicional verbalmente y después no contesta sus mensajes por varios días, demuestra poco interés en la relación. Esta modalidad de comunicación actúa como un intento de anular al otro, la otra persona siente que pierde su subjetividad. Esto configura una comunicación perversa, donde el que ejerce violencia emocional hace que el otro actúe la locura. No es fácil tener conciencia del maltrato emocional, ya que se trata de una violencia callada, poco perceptible. Puertas afuera puede resultar poco creíble porque el narcisista suele tener una imagen social de prestigio.
- ¿Cómo actúa el narcisista?
El narcisista toma al otro como un objeto, lo manipula para conseguir todo aquello que lo beneficie, por ejemplo en el ámbito laboral una persona narcisista puede aprovecharse de sus empleados para obtener lo que quiere y manipularlos con el sueldo, o en una relación de pareja puede utilizar a su compañero o compañera para obtener placer sexual, ocultando infidelidades recurrentes. Si bien brindan una imagen de grandeza, su vida emocional suele ser vacía, con una gran dificultad para establecer vínculos honestos y sinceros. La capacidad de empatía es prácticamente nula, por lo cual no puede registrar las necesidades ni los sentimientos de otras personas. Suelen mostrarse como personas empáticas y preocupadas por los demás, pero es sólo una fachada.
- ¿Qué características o habilidades tienen?
Si hay algo que caracteriza a las personas narcisistas es su habilidad para seducir y de esta manera obtener lo que necesiten del otro, para su propio beneficio. Se trata de personas que pueden tener mucho bagaje intelectual y utilizan esa inteligencia como táctica de seducción. Pero detrás de esta fachada se esconde una escasa inteligencia afectiva o emocional. Muchas personas con estas características adquieren puestos de poder o tienen profesiones donde estos rasgos pueden ser muy peligrosos (por ejemplo, en medicina, psicología, abogacía,etc.).
Lic. Emilia Gobbo
- ¿Qué pasa con las relaciones de pareja?
Las relaciones de pareja con personas narcisistas suelen ser enloquecedoras, generan un gran desgaste emocional. En muchos casos terminan en episodios de violencia física y en el peor de los casos en femicidios u homicidios. Los narcisistas mienten compulsivamente y se creen sus propias mentiras. Suelen generar relaciones adictivas, donde las peleas y las reconciliaciones son frecuentes. Los ciclos de la relación se caracterizan por la seducción inicial, una vez que el narcisista obtuvo lo que quiso deja de registrar a su pareja, ella comienza con los reclamos y reproches, tarde o temprano el narcisista la acusa de controladora, invasora, absorbente. No hay lugar para el dolor ni para la ira que genera en la pareja, y en este punto el narcisista amenaza con cortar la relación. Cuando una persona decide cortar su relación o alejarse del narcisista, el acoso será frecuente, volverá prometiendo cambios, promesas de empezar terapia, pero tarde o temprano todo volverá a ser igual. El ciclo de seducción, reconciliación, promesa de cambio, desencanto y pelea es constante y enloquecedor. Son personas que brindan una imagen aparente de seguridad, pero la realidad es que su autoestima está deteriorada. El narcisista suele ser infiel ya que necesita constantemente reafirmar dicha autoestima deteriorada.
- ¿Cómo son las personas que están en pareja con un narcisista?
Sus parejas suelen tener dos perfiles: personas vulnerables y dependientes, a quienes pueden manipular con facilidad y quienes sufren las peores consecuencias o personas independientes y fuertes de quienes se encargan de absorber toda su energía vital hasta sacar lo peor de ellas. Sus parejas tienden a idealizarlo, esto es lo que el narcisista necesita para reforzar su autoestima. La pareja del narcisista suele tener rasgos de codependencia, es decir suelen obsesionarse, controlar sus conductas y creer en sus falsas promesas de cambio. Por lo general son mujeres que asumen un rol de cuidadoras o protectoras. Cualquier persona puede caer en la trampa de un narcisista ya que sus rasgos de seducción y manipulación suelen ser muy atrapantes.
- ¿Cómo son las relaciones filiales?
Las personas con rasgos narcisistas tienen severas dificultades para registrar las necesidades de sus hijos, por lo cual los conflictos suelen ser frecuentes, principalmente en la adolescencia. Además, suelen ser exigentes y perfeccionistas con sus hijos y pueden llegar a tener sentimientos muy destructivos como la envidia. Las peleas se desatan cuando los hijos no actúan como su progenitor lo espera o no cumple con las expectativas. Son padres que en lugar de ocuparse de las necesidades emocionales de sus hijos, necesitan que los hijos se ocupen de ellos. Los hijos de padres narcisistas tienen mayor probabilidad de manifestar conductas adictivas, como modalidad de evadir el dolor emocional que implica no ser registrado o tolerar las discusiones constantes en la casa.
-¿Qué hacer si tomamos conciencia de que estamos con un narcisista?
El futuro de una relación de pareja con una persona narcisista no es nada prometedor, va a prometer cambios radicales, pero nunca llegarán. Las mentiras, engaños e infidelidades serán constantes. Son relaciones que pueden costar la salud mental y la integridad física, por eso es necesario cortarlas cuando se ha detectado este mecanismo. No es fácil poner el punto final, son procesos que pueden llevar tiempo. La mejor herramienta es cortar la comunicación. Cualquier intento de comunicación con un narcisista es un nuevo motivo para comenzar nuevamente con la manipulación. El narcisista busca la reacción impulsiva de su pareja, por lo cual lo mejor que podemos devolver es el silencio. No hay que enfrentar ni vengarse, hay que huir urgente de esa relación enferma. Cualquier intento de confrontación o discusión con una persona narcisista es tarea perdida, ya que utilizan sus habilidades comunicacionales para manipular y proyectar la culpa en el otro.
- ¿Estas personas pueden hacer algún tipo de terapia?
Estas personas no suelen llegar al consultorio, ya que no reconocen el daño que generan en los otros y tienen una imagen sobrevalorada de sí mismos. Quienes llegan a la consulta psicológica son sus hijos, parejas, compañeros de trabajo o empleados. Si un narcisista quiere cambiar, el cambio debe surgir desde adentro. Si bien son pocas las ocasiones en que esto sucede, el cambio puede darse porque pierden a una persona muy querida o por alguna crisis existencial que atraviese. El narcisismo es un rasgo de personalidad o patología que no distingue géneros.
Dos historias en películas
Dos películas recientemente estrenadas en la plataforma Netflix reflejan los efectos del narcisimo en las relaciones de pareja. "The Wife" y "El Castillo de Cristal", basadas en historias reales muestran este rasgo de personalidad.