Comienza este lunes el juicio por el crimen del empresario de El Fortín
Seis imputados serán juzgados por el robo seguido de homicidio de Ernesto Argüello (76), ocurrido en mayo de 2015.
Un tribunal compuesto por tres jueces técnicos y doce jurados populares comenzará este lunes 8 de mayo a juzgar a los presuntos autores del robo seguido de muerte del industrial de la localidad de El Fortín, Ernesto Alfonso Argüello (76), quien fuera asesinado en la noche del martes 12 de mayo de 2015.
Por el homicidio se encuentran detenidos en la cárcel de San Francisco Gonzalo Allendes, Martín Ibarra, Maximiliano Vergara y Miguel Márquez, en tanto comparecerán en libertad Verónica Allendes y Brian Gabriel Hatermann.
Los cinco primeros imputados están acusados como supuestos autores de "homicidio en ocasión de robo", mientras que Hatermann está acusado como supuesto autor de "encubrimiento agravado".
El juicio será oral y público, estará a cargo de los jueces integrantes de la Cámara Criminal y Correccional Mario Comes, Claudio Requena y Guillermo Rabino; la acusación estará en manos del fiscal de Instrucción Bernardo Alberione quien subrogará al fiscal de Cámara.
De la audiencia tomarán parte doce jurados populares (ocho titulares y dos suplentes), las defensas están a cargo de los dos asesores letrados de San Francisco, de Morteros y dos abogados particulares.
El hecho
La víctima era propietario de la firma Premoldeados Mateo y se dedicaba a la fabricación de equipamiento para tambos y criaderos de cerdos. Argüello era viudo y vivía en una casa ubicada en calle Catalina Bruera, a unos cien metros del edificio municipal y doscientos del destacamento policial.
El cuerpo sin vida del septuagenario fue hallado el miércoles 13 de mayo, cuando a las 7 de la mañana concurrieron su sobrino y un empleado a despertarlo porque el galpón en donde realizaban las tareas se encontraba cerrado y era común que Argüello antes de irse a la fábrica desayunara con su sobrino y este empleado en el único hotel de El Fortín.
De acuerdo a la investigación, los delincuentes lograron ingresar por la parte posterior de la vivienda en donde sorprendieron al hombre, que no podía caminar con normalidad; los malvivientes lo maniataron en la cama y lo torturaron a los efectos de conocer adónde guardaba los objetos de valor.
Según consta en la investigación, la causa del deceso de Argüello habría sido por asfixia mecánica para lo cual los delincuentes utilizaron una venda elástica.
Los sujetos acusados de haber cometido el robo y posterior homicidio, de acuerdo a la investigación, llegaron a El Fortín a bordo de un automóvil que era conducido por la hermana de uno de los imputados, Verónica Allendes quien se desempeñaba como remisera en una empresa de San Francisco.
Tanto la mujer como los cuatro hombres enfrenta la acusación más grave que es la de "homicidio en ocasión de robo"; no obstante, Hatermann fue imputado como presunto encubridor debido a que habría ayudado a los imputados a ocultar pruebas y deshacerse de algunos elementos que habían sustraído en la casa del empresario, entre ellos una escopeta.