Circo varado en Morteros vende sus vehículos para sobrevivir
Se trata de unas 25 personas que además salen todos los días a vender pan casero y churros a los vecinos de barrio Urquiza, donde quedaron parados. "No soy de vender cosas, pero la situación nos lleva a esto", dijo el propietario.
El Atlas no es el único circo varado en San Justo que tuvo que reinventarse durante la cuarentena. En la ciudad de Morteros, unos 25 integrantes del circo Gueorgue vienen realizando venta de comidas para subsistir pero no es suficiente para pagar las cuentas, por lo que tomaron la decisión de vender sus vehículos.
El circo llegó a Morteros dos semanas antes que se decretara la cuarentena obligatoria por la pandemia de coronavirus.
"Hace cuatro meses que estamos acá instalados y sólo pudimos hacer cuatro funciones", contó Marcos Yovanovich, propietario del circo.
En una nota publicada por AM 1530 Radio Centro Morteros, el empresario circense reconoció que "en una primera etapa mucha gente vino a traernos mercadería pero eso ya se cortó. La cosa se fue complicando por lo que salimos a vender pan casero, tortas asadas y churros por el barrio pero necesitamos pagar cuentas que se acumularon durante estos tres meses de cuarentena".
"No soy de vender cosas, pero la situación nos obliga"
Ante esta situación apremiante pusieron a la venta cinco vehículos, entre ellos un camión, la camioneta que utilizan para publicitar las funciones y el auto de su esposa.
Marcos Yovanovich, propietario del circo Gueorgue
"No soy de
vender cosas, pero la situación nos lleva a esto", aseveró Yovanovich.
El circo, de raíces yugoslavas comenzó con sus tatarabuelos y según recuerda Marcos en boca de su padre: "nunca en la vida nos pasó algó así".
Marcos contó que en realidad el circo se compone de unas 60 personas, de las cuales sólo quedaron 25 porque el resto logró volverse a sus lugares de residencia.
"Muchos de los integrantes partieron hacia sus respectivas casas en Buenos Aires, Entre Ríos o Bahía Blanca, por ejemplo. Yo les dije que se vayan", manifestó.
La ventaja de quedar varado en una localidad pequeña
Por otra parte, Yovanovich agradeció a la comunidad morterense por la solidaridad, al municipio y al dueño del terreno donde están parando.
"La gente de Morteros es muy servicial y buena. Damos gracias a Dios que nos tocó quedarnos acá y no en grandes ciudades", reconoció.
En este sentido contó que "tengo colegas que quedaron varados en ciudades grandes y no pueden salir a hacer nada, están estancados en el circo y sin recibir ningún tipo de ayuda".
El circo Gueorgue venía de actuar en Suardi y, tras estar en Morteros, debía seguir hacia Brinkmann y su gira en la región. Además tenían previsto actuar en Córdoba durante las vacaciones de invierno, algo que no podrá ser.