Brinkmann: millonaria inversión en la primera granja porcina
La empresa familiar DPB invirtió U$S para la construcción de este emprendimiento que produce alrededor de 1000 porcinos por mes para abastecer a La Piamontesa.
El crecimiento que muestra el consumo interno de cerdo sumado al desarrollo de la exportación ha convertido a la producción de carne porcina en una actividad de muy buen presente y con mucho potencial.
Así lo entendió la empresa familiar DPB, ubicada en Brinkmann, que invirtió cuatro millones de dólares en la construcción de una granja que provee mil cerdos por mes. El destino de esa producción es abastecer al frigorífico La Piamontesa, con base también en esta localidad del departamento San Justo.
"Es la primera vez en 66 años que La Piamontesa tiene su propia granja de cerdos para el
abastecimiento", comentó a La Voz del Interior Daniel Giacosa, vicepresidente de La
Piamontesa e integrante de la empresa DPB.
Creado por Averaldo Giacosa en 1953, el frigorífico tiene como accionista mayoritario a la familia del fundador, que a su vez es propietaria de DPB.
La granja, que funciona desde hace un año, está construida en un campo familiar que históricamente estuvo destinado a la agricultura."El establecimiento le vende los cerdos a La Piamontesa", aclaró Giacosa.
Con un nivel de actividad que alcanza a las 15 mil cabezas mensuales, La Piamontesa es el principal faenador de cerdos de la provincia. El 80 por ciento de la producción la destina a la producción de embutidos y el resto lo comercializa en carne fresca.
La granja porcina cuenta con un
plantel de 500 madres y está construida en espejo, con la posibilidad de incorporar otro módulo
similar para albergar otras 500 cerdas en producción.
Su tecnología disponible y su sistema de alimentación líquida para el engorde de los capones le brindan al establecimiento una alta eficiencia productiva.
"Está produciendo un cerdo de alta calidad, con un rendimiento de 60 por ciento de magro", indicó el industrial.
Luego de la compra de la empresa Campo Austral, en enero pasado, La Piamontesa tomó el control de otras ocho granjas distribuidas en Buenos Aires, La Pampa, Córdoba y La Rioja, con ocho mil cerdas en producción.
"El eslabón en el que más debe crecer la cadena del cerdo es en la incorporación de granjas de engorde. Es fundamental para seguir creciendo en consumo interno y desarrollar más la exportación", indicó Giacosa.