Bombarderos de EE.UU. realizan nuevas maniobras en la península coreana
La tensión entre el país americano y Corea del Norte es cada vez mayor. El ejercito estadounidense cuenta con el apoyo estratégico de Japón.
Dos bombarderos estratégicos estadounidenses realizaron
maniobras en la península coreana luego de que el presidente de los Estados
Unidos, Donald Trump, volvió a recalentar la escalada entre Washington y
Pyongyang al insistir en que se agotaron las instancias de diálogo para
resolver la crisis en la región, se informó hoy.
Los aviones B1B realizaron simulacros de bombardeo sobre objetivos terrestres
con dos cazas F-15 de las fuerzas aéreas surcoreanas, según anticipó un
portavoz del Ministerio de Defensa en Seúl y posteriormente confirmó la Fuerza
Aérea norteamericana.
El ejercicio "regular" y "disuasorio", como lo describieron
desde Seúl, se llevó a cabo ayer sobre el Mar de Japón (llamado Mar del Este en
las dos Coreas) y sobre el Mar Amarillo (Mar del Oeste), donde una vez
terminado el ejercicio los bombarderos estadounidenses retornaron a la base en
la isla de Guam.
Las Fuerzas Aéreas estadounidenses publicaron posteriormente un comunicado en
el que se detalló que los bombarderos estratégicos realizaron también el mismo
martes maniobras nocturnas con cazas del ejército japonés.
Es la primera vez que los B-1B realizan ejercicios combinados por la noche con
sus dos aliados asiáticos, según el texto, lo que supone "una clara
demostración de nuestra habilidad para realizar operaciones de manera continua
con todos nuestros aliados, cuando sea y donde sea", explicó el comandante
Patrick Applegate en el comunicado, citado por la agencia de noticias EFE.
El Pentágono envió en varias oportunidades los B-1B a la península coreana en
respuesta a los continuos test armamentistas de Pyongyang, algo que unido a los
duros intercambios dialécticos entre ambas partes incrementó la tensión en la
región hasta niveles inéditos desde el fin de la Guerra de Corea (1950-1953).
La última vez que Estados Unidos envió estos bombarderos fue el 23 de
septiembre, en medio de un acalorado cruce de acusaciones entre Trump, que
amenazó ante la ONU con destruir Corea del Norte, y el líder norcoreano, Kim
Jong-un, quien respondió que "domaría con fuego" al magnate.
Según el Pentágono, el vuelo de los bombarderos de finales de septiembre fue el
que más se acercó a territorio norcoreano en lo que va de siglo.
En los últimos días, la tensión volvió a elevarse cuando el presidente de
Estados Unidos insistió en que la estrategia seguida por los gobiernos que lo
precedieron en Washington con Pyongyang fracasó.
"Nuestro país lleva 25 años ocupándose de Corea del Norte sin éxito, ha
gastado miles de millones de dólares y no ha obtenido nada. ¡La estrategia no
ha funcionado!", declaró Trump dos días atrás, reavivando la hipótesis de
una salida militar a la crisis con Corea del Norte.
El fin de semana pasado el magnate republicano ya había dicho que era una
pérdida de tiempo dialogar con Pyongyang y que con Corea del Norte sólo
funciona una cosa, insinuando una opción militar.