Ayer alumna, hoy profesora del taller
Con solo 24 años, Micaela Gallardo, regresó al Ipet 50 "Ing. Emilio F. Olmos" para devolver frente a un aula, todo lo allí aprendido. Ayer fue alumna, hoy es profesora, aunque no es común ver una mujer luciendo el delantal azul en la escuela técnica.
Con solo 24 años, Micaela Gallardo, desde comienzos de noviembre, es docente en el Ipet Nº 50 "Ing. Emilio F. Olmos". Si bien no es común ver a mujeres al frente de los talleres del establecimiento educativo, Micaela tiene la particularidad de haber sido alumna de la "escuela del trabajo", donde aprendió el oficio.
Su entorno familiar se enorgullece pero no se sorprende, mucho menos sus colegas docentes que, años atrás, fueron los encargados de formarla. Pero Micaela, no se quedó únicamente con ello, además, es licenciada en Seguridad y Salud Ocupacional.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, la joven se refirió a cómo surgió esta posibilidad vinculada a la docencia en el Ipet 50. "Fue pura suerte. Abrí el legajo en 2016. Después del secundario, hice la licenciatura en Seguridad y Salud Ocupacional. Por esta razón, en junio del año pasado, fui a la escuela con mi currículum preguntando si necesitaban a alguien en Higiene y Seguridad".
Y continuó: "No sabía si había lugar o no, en ese momento me dijeron que me tenía que fijar en las convocatorias, justo estaban abiertas. La secretaria, que sabía que yo había egresado en el colegio, me dijo que había horas en la materia Máquinas y Herramientas y me consultó si me interesaban, eran en el taller. Llamaron al director, me preguntó si me sentía cómoda, le dije que sí y agarré, fue de casualidad".
"Empecé el año pasado, las suplencias fueron cortitas pero muy lindas", acotó y señaló: "Volví ahora, a principios de noviembre porque el profe titular tomó un cargo superior. Esta suplencia puede extenderse por dos o tres años".
"Me emociona ir al colegio"
Al ser consultada acerca de cómo vive esta etapa como profesora, Micaela remarcó que "es hermoso, no caigo. Me emociona ir al colegio, me emociona ver a los chicos tan predispuestos. Al taller siempre van con muchas ganas y energía. El trato de ellos para conmigo es muy responsable, hay mucho respeto".
"Reaccioné con mucha emoción, con ansiedad pero contenta. Tenía ganas de llorar de la alegría y a su vez tenía la duda de saber si podría ser una buena profesional. Me encanta, es un desafío que acepté", le contó la docente a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Y agregó: "Mi familia está muy contenta, mis hermanas, mis tíos. Me dijeron como que todo llega, como quién diría que iba a dar clases en el taller una mujer. Es muy lindo".
Su carrera como docente va en franco ascenso y, conjuntamente a su rol en el Ipet 50, es profesora en el Ipem Nº264 "Teodoro Asteggiano" y en la tecnicatura en Higiene y Seguridad que se brinda en la Escuela Normal Superior "Dr. Nicolás Avellaneda".
Sus primeras vivencias
Durante los primeros días en frente de la materia de Máquinas y Herramientas I, Micaela vivió varias experiencias que, según cuenta, no dejan de sorprenderla día a día.
En ese sentido, manifestó que "es rarísimo. Los otros días comencé a dar la clase de instrumentos de medición y fue como '¡ah, la profe sabe!' y después les conté que fui alumna del colegio. Todos se quedaron sorprendidos".
"Es todo un desafío. Acá en taller, los chicos que vienen a estudiar, mayoritariamente, quieren ejercer como técnicos, entonces te hacen más preguntas, esas mismas preguntas que a ellos les surgen como dudas a mí en la etapa de alumna también me surgieron y siempre hubo un profesor que las supo responder", comentó.
Sobre el final de la entrevista, Micaela expresó: "Me siento muy cómoda con los profesores, además es lo que me gusta y me recuerda a mi etapa de alumna. Son muy solidarios conmigo, en muchos casos fui alumna de los profesores que hoy en día son mis colegas".