Advierten que faltarán juguetes en Navidad
"En agosto ya registramos un alza del 40% interanual en los valores, para diciembre esos números serán aún mayores", dijeron desde la Cámara Argentina de la Industria del Juguete.
Las Fiestas están a la vuelta de la esquina. Y más cerca, la Navidad, la fecha más esperada por los niños expectantes de recibir regalos.
Este año, en medio de la pandemia, desde las jugueterías advierten que habrá faltante de productos y ya anticipan que los precios sufrirán incrementos. "En agosto ya registramos un alza del 40% interanual en los valores, para diciembre esos números serán aún mayores", dijeron desde la Cámara Argentina de la Industria del Juguete.
Cristina Ribba, de juguetería Mágico Mundo -Bv. 25 de Mayo 1572- aún guarda la ilusión de lograr que la Navidad sea el disparador para recuperar algo de ventas pedidas en un año signado por la pandemia que afectó notoriamente a toda la economía.
El primer obstáculo al que se enfrentan las jugueterías de la ciudad de cara a las ventas navideñas es la falta de productos por parte de los mayoristas. "Al acceder a las páginas web de los mayoristas jugueteros nos encontramos con que muchos anuncian que tienen stock cero y ni siquiera nos dicen cuándo van a recibir productos", explicó el comerciante.
El primer obstáculo al que se enfrentan
las jugueterías de la ciudad de cara a las ventas navideñas es la falta de
productos por parte de los mayoristas. "Al acceder a las páginas web de los
mayoristas jugueteros nos encontramos con que muchos anuncian que tienen stock
cero y ni siquiera nos dicen cuándo van a recibir productos", explicó a LA VOZ
DE SAN JUSTO para luego aclarar que esa incertidumbre se da tanto en los
juguetes nacionales como los importados. Para prepararse para las fiestas de fin
de años, los jugueteros comienzan a planificar la demanda apenas transcurrido
el Día del Niño. "A principios de septiembre ya empezamos
a ver qué compramos para la Navidad. En este caso, estábamos en plena pandemia
y sin embargo, teníamos que planificar lo que íbamos a hacer para estas
fiestas. Trabajamos con pedidos vía mail y lamentablemente no encontramos casi
nada disponible", explicó. Ante esta situación, Ribba mencionó que
la respuesta de los proveedores fue que "no recibían mercadería de los
fabricantes, tanto nacionales como importados. En el caso de la industria
local, se nos informó que trabajaban con una capacidad limitada al 50 % porque
habían estado cerrados por la cuarentena y cuando retomaron tenían mucho
personal de riesgo, no podían llegar hasta sus trabajos por la falta de
transporte y trabajaban como podían". Con este panorama, "hay incertidumbre"
respecto del momento en que el sector pueda normalizar su proceso productivo. En el mercado nacional del juguete, los
comercios pueden acceder apenas a dos o tres marcas como el caso de Duravit,
Rondi y Yolibell. De todas maneras, en las dos primeras empresas Ribba dijo que
"hay muy poca mercadería en stock". Para "surfear" esta realidad, los
comerciantes apelan a marcas menos conocidas pero no por ello de menor calidad
como Antex o PlanZ que presentan un mayor stock y algo más de variedad para poblar
las góndolas. En el mercado del juguete importado, la
vendedora reconoció que "hay mayor variedad" lo que permite suplantar productos,
algo que no ocurre con productos nacionales. Para establecer el precio de los
juguetes, "nos basamos en los precios que nos pasan nuestros
proveedores. En el caso de los juguetes importados, suelen aumentar menos
veces en el año que los de industria nacional. En esto mucho tiene que ver lo
que cambian los costos fijos sumado al incremento en el precio del dólar que
influye tanto para los productos importados como en los nacionales". "La industria nacional está trabajando
muy bien, creció considerablemente la demanda por la falta de productos
importados y porque estos incrementaron notablemente sus precios por el alza
del dólar. Lo cierto es que hay falta de materia prima, por lo que la demanda
no llega a abastecer el stock de las fábricas", explicó Emmanuel Poletto,
presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete. Y señaló que muchas jugueterías
decidieron no traer ciertos artículos porque sus precios se dispararon con la
suba del dólar. "A partir de ahí muchos juguetes nacionales comenzaron a volver
a tomar protagonismo", explicó Poletto. Por ejemplo, un monopatín importado de
marca Micro cuesta en el país $15.000 en promedio. Ahora bien, uno similar pero
de fabricación nacional cuesta tres veces menos. "Los valores arrancan en
$3500, pero llegan hasta $7.000. Lo cierto es que en los últimos meses esos
productos sufrieron alzas constantes" explicó una juguetera. Esto se debe a que
los juguetes para el aire libre tuvieron un boom de demanda por la cuarentena,
sobre todo a partir del inicio de la primavera y a que hay faltante de
plástico. "A esto se suma que las fábricas en este contexto debieron
incrementar sus costos para poder estar operativas", describió Poletto. El principal gasto que atribuyen desde el
sector es el traslado del personal. "Al no tratarse de un rubro esencial no
pueden viajar en transporte público, por lo que cada empresa debe encargarse de
la logística, lo cual implica un gasto extra. A esto se suma el personal mayor
de 60 años o con patologías que hoy están de licencia y la implementación del
protocolo que encarece todos los costos de producción", ejemplificó el
especialista. Claro que eso se traduce en un incremento
de los precios para los consumidores. "El último relevamiento que realizamos
fue en agosto por el Día del Niño, en ese momento acumulábamos un alza
interanual del 40%, ese número será aún mayor para las Fiestas", concluyó.Reina la incertidumbre
Segundas marcas y precio
Lo nacional recobra protagonismo